Escudo de Colombia y texto de la Unidad para las Víctimas

Víctimas del corregimiento de Estados Unidos, en el Cesar, tienen un nuevo despertar con la reparación colectiva

La Unidad para las Víctimas, en el marco del proceso de reparación colectiva, adelanta la reparación del corregimiento de Estados Unidos y sus nueve veredas.

En zona rural del municipio de Becerril, Cesar, entre los años 1990 al 2002 se sufrieron los embates de la violencia; el corregimiento de Estados Unidos y sus veredas, que son nueve, pasó a ser un desolado lugar donde de 700 familias, solo tres decidieron quedarse a morar tras atroces escenas que registraban muerte y otros hechos victimizantes, que amenazaban a los campesinos moradores de estas tierras y a quienes les tocó salir de su terruño dejando animales, cultivos y sus humildes viviendas.

Hoy es otro el panorama: “Gracias a Dios podemos recibir estas herramientas y tener un nuevo despertar”, dijo Víctor Julio Esteban, habitante de la vereda Alto del Tocuy, quien se encontraba en la entrega de la maquinaria agrícola que entregó la Unidad para las Víctimas al Sujeto de Reparación Colectiva que constituye Estados Unidos y sus veredas; sus memorias de antaño no son las más agradables, pero sus rostros esperanzados dibujan una sonrisa que ha sido reconstruida con el pasar del tiempo y la ayuda en los procesos de acompañamiento.

Los sábados, el pueblo converge en la ‘caseta’ o ‘KZ’, el lugar donde hay fiesta y baila, este fue uno distinto porque la cita fue más temprano y con el despuntar del día se cambió la rutina del campo para juntos ir a recibir las máquinas que, como medida fue concertada en el Plan Integral de Reparación Colectiva (PIRC) con la Unidad para las Víctimas. “Recibimos esto con gran satisfacción, lo recibimos porque reconocemos los grandes esfuerzos que hemos hecho nosotros como víctimas en conjunto con la Unidad de Víctimas y el Estado colombiano quien ha tenido a bien darnos estas herramientas para mitigar un poco ese gran impacto que tuvo esa violencia atroz que tuvimos que sufrir”, expresó Édgar Delgado Amarís, presidente de la Vereda Alto Manantial.

La Unidad para las Víctimas entregó maquinaria agrícola que consiste en un tractor, así como un vehículo tipo camión de carga, elementos que superan la inversión de 400 millones de pesos. “Estos elementos van a servir para recuperar la productividad del campo en esta comunidad que fue afectada en el marco del conflicto armado, estas son medidas que hacen parte del PIRC”, explicó Mario Ríos Oñate, director territorial Cesar – La Guajira de la Unidad para las Víctimas, quien además explicó que los elementos fueron entregados en presencia del alcalde de Becerril, Fabián Martínez, con quien se articula para trabajar en beneficio de esta población víctima en procura de que esta maquinaria pueda aportar al desarrollo de nuevos proyectos que desde la administración municipal se erijan.

En la Unidad para las Víctimas “Cambiamos para servir” con el objetivo de seguir trabajando en acciones de cara a la implementación de una política que contribuya a la superación de los rezagos, brinde una reparación transformadora y le permita a quienes han padecido el conflicto armado acceder efectivamente a sus derechos.