Naciones Unidas reitera compromiso con Colombia para consolidar la estrategia de soluciones duraderas

A través del asesor especial sobre Soluciones al Desplazamiento Interno del Secretario General, Robert Piper, Naciones Unidas reiteró su compromiso por acompañar a Colombia en el diseño e implementación de la estrategia de soluciones duraderas para las víctimas de desplazamiento forzado.

Robert Piper, reiteró su compromiso con Colombia para consolidar el diseño y puesta en marcha de una estrategia de soluciones duraderas
Robert Piper, reiteró su compromiso con Colombia para consolidar el diseño y puesta en marcha de una estrategia de soluciones duraderas

Este miércoles, Naciones Unidas, a través del asesor especial sobre Soluciones al Desplazamiento Interno del Secretario General, Robert Piper, reiteró su compromiso con Colombia para consolidar el diseño y puesta en marcha de una estrategia de soluciones duraderas, un enfoque dirigido a que las víctimas de desplazamiento superen su situación de vulnerabilidad.

Tras reafirmar su apoyo, el delegado expresó su deseo de que Colombia sea un ejemplo mundial en la implementación de estas acciones encaminadas a mitigar los impactos del desplazamiento en el país. A su vez, hizo un llamado a que se acelere el proceso y a que el Gobierno de Colombia, con urgencia, presente cuánto costará la primera etapa de la estrategia de soluciones duraderas, en la cual se espera que dos millones de personas superen su situación de vulnerabilidad.

“Debemos tener claridad sobre el coste de esta estrategia para poder avanzar. Hay que ser agresivos para lograr que esta propuesta se integre a las políticas públicas y nosotros daremos el apoyo técnico. Colombia puede ser un piloto muy importante en cómo lograr una estrategia de soluciones duraderas”, afirmó Piper.

A su turno, la directora de la Unidad para las Víctimas, Patricia Tobón Yagarí, indicó que en el país existen más de ocho millones de víctimas de desplazamiento forzado y que muchas de ellas se encuentran en condiciones de extrema pobreza. Una situación que ha instado a que el Gobierno del Cambio acoja las recomendaciones de Naciones Unidas y adelante el diseño de esta estrategia para que quienes han sido obligados a salir de sus territorios por causa del conflicto armado puedan resolver las necesidades derivadas a este hecho victimizante.

“Estas víctimas están en situación de pobreza: sin acceso a servicios básicos, educación, agua potable, vivienda e infraestructura. Esta población requiere de una reintegración social. En este Gobierno acogimos las recomendaciones de Naciones Unidas sobre la estrategia de soluciones duraderas y propusimos en el Plan Nacional de Desarrollo contribuir a que dos millones de personas superen su situación de vulnerabilidad”, expresó Tobón Yagarí, y agregó que esta estrategia está siendo liderada por la Unidad para las Víctimas, junto con el Departamento de Planeación Nacional y Prosperidad Social.

Asimismo, mencionó que se ha adelantado un trabajo importante con nuevos mandatarios y mandatarias para que en los nuevos planes de desarrollo territoriales se incluya la política pública de víctimas con un enfoque de soluciones duraderas.

Además, Tobón Yagarí mencionó algunas de las estrategias puestas en marcha para conseguir más recursos y que otros sectores se sumen a esta iniciativa como un paso para mitigar los rezagos en materia de atención y reparación: “Estamos analizando la estrategia para la distribución de los recursos y necesitamos elevar esta discusión, así como involucrar a las demás entidades y otros sectores. Queremos que también se sume la cooperación. Es hora de darle recursos a la paz”.

En esta reunión, que se realizó en Washington, Estados Unidos, también participaron Paulo Mina, ministro plenipotenciario de la Embajada de Colombia en Estados Unidos; Eleonora Betancur, directora general de la Agencia Presidencial de Cooperación Internacional de Colombia, y María Andrea Albán, directora cooperación internacional de la Cancillería, para reforzar la visibilidad de esta estrategia como una prioridad en la agenda global.