El Enfoque de Soluciones Duraderas, dirigido a víctimas de desplazamiento, será incluido en el Plan de Desarrollo Departamental de Magdalena para aportar a la superación de la vulnerabilidad que sufren y cuyos efectos se han intensificado por el conflicto armado.
Así lo anunciaron Patricia Tobón Yagarí, directora de la Unidad para las Víctimas, y Rafael Martínez, gobernador de Magdalena, luego de una reunión en la que analizaron la situación de las más de 346.000 víctimas que habitan el departamento y que están incluidas en el Registro Único de Víctimas (RUV). De ese universo, 303.771 son víctimas de desplazamiento.
Con la decisión, Magdalena se une a otros territorios, como Cali y Florencia, que han adoptado este enfoque en los planes de desarrollo, algo fundamental pues estos son las rutas de trabajo para los territorios durante los próximos años.
Tobón Yagarí destacó que el objetivo es juntar los esfuerzos del Gobierno nacional, que impulsa en el país este enfoque propuesto por Naciones Unidas, y de los gobiernos locales y departamentales, que implementan las políticas en las regiones, servirá para “avanzar en materia de atención de sus derechos”.
Los funcionarios concertaron una mesa de trabajo para avanzar con la implementación de 31 de los 36 sujetos de reparación colectiva registrados en Magdalena, para que sean priorizados y focalizados en el Plan de Desarrollo Departamental.
Además, Tobón Yagarí también se reunió con el alcalde de Santa Marta, Carlos Pinedo, quien anunció su apoyo e inclusión de las soluciones duraderas en su Plan de Desarrollo Municipal para que las más de 96.000 víctimas de desplazamiento que habitan el municipio puedan resolver, de manera sostenible, sus necesidades derivadas a este hecho victimizante.
¿Qué son las soluciones duraderas?
Es un enfoque propuesto por la Organización de Naciones Unidas (ONU) para que los países con mayor número de refugiados o desplazados internos realicen acciones y procesos sostenidos en el tiempo para la reconstrucción de los proyectos de vida de las víctimas afectadas por este fenómeno.
Colombia cuenta con más de ocho millones de víctimas incluidas en el RUV por desplazamiento. La falta de vivienda, generación de ingresos y alimentación son los mayores rezagos con las víctimas.
Por eso, el Gobierno ha promovido que las regiones adopten este enfoque para una atención a víctimas que busque la reintegración y reubicación -de manera más sostenible- en el territorio al que se desplazaron, o para retornen a sus lugares de origen.
La situación de las víctimas en Magdalena
La última proyección del DANE indica que en Magdalena hay 1.513.782 personas, de las cuales 346.001 son víctimas según el Registro Único de Víctimas (22,9% del total de la población).
El Modelo de Intervención Territorial Integral (MITI), herramienta que permite analizar el contexto y las necesidades de los territorios en materia de reparación, atención humanitaria y oferta estatal, señala que el departamento requiere de un nivel de intervención “alto” porque nueve de cada diez víctimas de desplazamiento forzado no han superado su situación de vulnerabilidad.
Indica que Santa Marta posee el mayor número de víctimas de desplazamiento forzado que no superan su situación de vulnerabilidad (96.932), seguido de Fundación (26.026), Ciénaga (23.761) y Zona Bananera (22.819). Además, que los principales rezagos están en los derechos a vivienda, generación de ingresos y alimentación.
Temas recomendados
Asimismo, señala que:
- El 61,8% de las víctimas están en pobreza monetaria. Es decir, no tienen ingresos para cubrir el costo de una canasta básica de bienes y servicios.
- El 28,6% están en pobreza extrema.
- El 26,5% en pobreza multidimensional. Es decir, que tienen privaciones en trabajo, educación, salud, vivienda y condiciones de la niñez y juventud.
La información contemplada en el MITI fue entregada por la directora de la Unidad, Patricia Tobón, a los equipos del gobernador y el alcalde con el fin de que puedan implementar planes y programas enfocados a resolver las necesidades de las víctimas del conflicto armado de acuerdo a su contexto actual.