“La guerra se enfrenta con emprendimientos y ese es el aporte de a la paz”. Así se expresó María Cecilia Bedoya, víctima de desplazamiento forzado en dos ocasiones, y quien gracias al apoyo que ha recibido por parte de las diferentes entidades ha sacado adelante dos proyectos productivos junto a 40 mujeres víctimas pertenecientes a la Asociación AMY.
Gracias a su lucha, empoderamiento y liderazgo, siendo la Representante Legal de dos microempresas en Yarumal, municipio del norte del departamento de Antioquia, María Cecilia se ha convertido en una mujer ejemplo para muchas otras, a quienes les ha brindado apoyo emocional y económico. “Para decir verdad, la parte económica lo va sanando todo poco a poco, no se olvida pero se perdona”, cuando se refiere a que hoy pueden contar con dos unidades productivas que benefician a las mujeres de la asociación y a sus hijos.
Con la dotación de más de $40 millones en máquinas e implementos entregada por Propaís, la formación en diferentes aspectos por el SENA, el acompañamiento técnico de la Unidad para las Víctimas, el local en comodato entregado por la administración municipal, y el aporte de la Gobernación de Antioquia han ayudado a que la microempresa de pulpas y el taller de confecciones hayan podido sostenerse por más de cinco años, y comercializar sus productos y servicios en los municipios cercanos de Ituango, Briceño, San Andrés de Cuerquia y en el mismo Yarumal.
“Hemos ido poco a poco, el registro Invima fue uno de los mejores inicios para nuestras pulpas, eso nos abrió muchas puertas. Nos hemos capacitado mucho porque lo que queremos es llegar a poder sacar pulpas totalmente orgánicas. Adicionalmente a esto la idea de empresa es lograr una cadena en la que se beneficien las mujeres del campo, y luego en la procesadora ya se realice el resto del proceso”, afirmó Maria Cecilia.
Para Wilson Córdoba, director de la Unidad para las Víctimas en Antioquia, “esta es la forma en que las víctimas deben de salir adelante, con emprendimientos que puedan ser capaces de sostenerse en el tiempo para que puedan superar lo que les tocó vivir debido al conflicto armado en sus territorios”.
El funcionario dijo también que “las víctimas deben organizarse en asociaciones para poder acceder a los recursos destinados por parte del gobierno nacional, departamental o territorial en los proyectos productivos y que tengan una verdadera intención de superar las condiciones de vulnerabilidad”.
Según el Registro Único de Víctimas, en Yarumal hay 10.652 víctimas siendo el 25.6 % de la población total del municipio. En el municipio existen nueve organizaciones de víctimas y dos organizaciones defensoras de derechos humanos.
(Fin/SMC/CMC/LMY)
