La Unidad para las Víctimas impulsa acciones clave en Santander para transformar la vida de las comunidades afectadas por el conflicto armado

Con una inversión superior a $200 millones, la Unidad para las Víctimas Territorial Santander trabaja en la reparación y dignificación de las familias afectadas por el conflicto armado mediante proyectos que atienden necesidades prioritarias, reflejando su compromiso constante con estas comunidades.

La Unidad para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas (UARIV), bajo el liderazgo estratégico de su directora nacional, Lilia Solano, da inicio al 2025 con la implementación de proyectos transformadores que fortalecen el bienestar y la reparación integral de las comunidades afectadas por el conflicto armado en Santander.

En alianza con la alcaldía de Betulia (Santander), se entregaron materiales para la construcción y adecuación de la sala de urgencias del puesto de salud en la vereda Putana, sector Tienda Nueva. Esta iniciativa contó con una inversión total de $218.275.481, de los cuales la Unidad para las Víctimas aportó $124.716.145.

Asimismo, la Unidad para las Víctimas y la alcaldía de Betulia inauguraron la adecuación del restaurante escolar del Colegio Integrado Nuestra Señora de la Paz, que tuvo una inversión de $124.161.579, de los cuales $90.161.579 fueron aportados por la Unidad. Esta intervención beneficiará a más de 680 estudiantes, promoviendo un entorno de convivencia y mejores hábitos alimenticios en la comunidad educativa.

La directora de la Unidad para las Víctimas, Lilia Solano, añadió que hoy se celebra un paso significativo en el camino hacia la reparación y el bienestar de nuestras comunidades. “Estas obras, más que infraestructura, son un símbolo de esperanza, dignidad y reconstrucción. La adecuación del restaurante escolar en la vereda La Putana no solo ofrece un espacio adecuado para la alimentación de nuestros estudiantes, sino que también fortalece el tejido comunitario y el desarrollo integral de nuestra niñez y juventud.”

Estos proyectos beneficiarán a las comunidades de Tienda Nueva, Las Vegas, La Playa, Casa de Barro y Almendros, fortaleciendo los servicios de atención sanitaria para cientos de familias. “La adecuación de la sala de urgencias en el centro de salud de Tienda Nueva es una respuesta a las necesidades de atención primaria en zonas rurales. Este esfuerzo conjunto nos recuerda que la reparación no es solo un acto de justicia, sino también una oportunidad para garantizar mejores condiciones de vida y acceso a derechos fundamentales”, señaló Francisco Triana, director territorial de Santander.

A través de estas intervenciones, la UARIV reafirma su propósito de reconstruir el tejido social y promover el desarrollo integral en regiones históricamente afectadas por la violencia. Estas acciones marcan un paso firme hacia la dignificación y la mejora de la calidad de vida de las víctimas del conflicto armado.