El plan de reparación colectiva a la Mesa LGBT de la comuna 8 de Medellín cumplió con otra acción en su ruta para resarcir a las víctimas del conflicto armado en razón de sus orientaciones sexuales e identidades y expresiones de género diversas.
Con ese fin, la Unidad para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas entregó en la sede de Casa Diversa maquinaria e insumos textiles para iniciar un proyecto productivo de confección y comercialización de ropa y accesorios enfocados en la población de lesbianas, gays, bisexuales y trans (travestis, transexuales y transgénero).
Este emprendimiento y las dotaciones artísticas y telas entregados el año pasado hacen parte de las medidas de fortalecimiento de este colectivo y los procesos sociales que realizan en varias zonas de Medellín.
Así lo reconoce Felipe Higuita, integrante del grupo, quien afirma que “este proyecto productivo es una apuesta para generar recursos con un vestuario que nos identifica como colectivo, pero también a la población LGBT en muchos espacios de ciudad y de país”.
También valida el enfoque diferencial que tiene la unidad de negocio, ya que “es una forma de reivindicar derechos y contra acciones homofóbicas que han pasado por nuestros cuerpos y nuestras vidas y encarnarlos en estampaciones en ropa, gorras y accesorios con el enfoque de diversidad”.
Plan con enfoque diferencial
La Mesa LGBT de la Comuna 8 es el primer sujeto de reparación colectiva de víctimas en Colombia con el enfoque diferencial de orientaciones sexuales e identidades de género diversas.
A través de un proyecto social, político y comunitario, denominado Casa Diversa, inciden para que no se repita la persecución y la violencia que ya padecieron desde hace 15 años, cuando los grupos armados ilegales que delinquían en esta zona centro-oriental de Medellín los estigmatizaron, amenazaron y desplazaron por manifestar su orientación sexual. También fueron objeto de violencia sexual.
Según el director de la Unidad para la Reparación a las Victimas en Antioquia, Wilson Córdoba, “para la implementación del plan de reparación colectiva se proyecta una inversión de 1.390 millones de pesos y se contemplan medidas de fortalecimiento organizacional, rehabilitación emocional, de satisfacción y no repetición de los hechos victimizantes”.
También indicó que, gracias al enfoque diferencial, “el plan es pionero para implementar mejores políticas públicas y garantizar los derechos de esta población afectada por la violencia de género y el conflicto armado”.
Para John Restrepo, representante de la Mesa LGBT de Medellín y víctima de la violencia de género y el desplazamiento forzado, “estas acciones permiten recuperar nuestras formas de encuentro, de reconstrucción de prácticas comunitarias, sociales y culturales, que aportan a las garantías de no repetición en nuestro proceso de reparación¨.
El plan de reparación colectiva, concertado con la Unidad para las Víctimas, inició su implementación en 2019 con una resolución de fortalecimiento organizacional, cuya primera medida fue la compra de una sede para la Corporación Casa Diversa y su dotación tecnológica y mobiliaria. Hasta ahora se han invertido más de 750 millones de pesos en las primeras acciones.
Fin/JCM/COG
