Durante este año, la Unidad para las Víctimas se enfocó en ampliar el análisis de la información suministrada por quienes han padecido el conflicto armado para entender más a fondo cómo las dinámicas de la guerra interna han afectado a las y los colombianos. Por eso, a través del área de Registro y Gestión de la Información, la entidad construyó herramientas tecnológicas y mejoró los tiempos de valoración de quienes se declaran como víctimas. El objetivo fue uno: acercar a la sociedad y a la institución encargada de la política pública de víctimas.
Para lograrlo, la Unidad creó el portal Datos para la Paz, un espacio web para adentrarse en el mundo que compone el Registro Único de Víctimas (RUV), los principales hechos victimizantes ocurridos en el marco del conflicto armado y los lugares en los que han ocurrido más de estos eventos, entre otros. Con los reportes emitidos desde este portal, la Unidad ha puesto la información al servicio de las víctimas y de la construcción de paz. Humanizar la información ha permitido que diversas entidades, la academia, víctimas y la sociedad en general puedan acceder a análisis e información actualizada sobre la situación de las víctimas y las dinámicas del conflicto armado.
El área de Registro y Gestión de la Información también desarrolló el Modelo de Intervención Territorial Integral (MITI), un instrumento que permite identificar las necesidades de los territorios para entender los niveles de vulnerabilidad a los que están expuestos. Esto facilitó la planeación de las entidades nacionales y locales para promover intervenciones articuladas con miras a lograr condiciones de bienestar y la inclusión de las víctimas.
Por primera vez se aseguró la operación continua de las valoraciones, reduciendo rezagos históricos y cumpliendo los tiempos establecidos en la Ley de Víctimas. Gracias a esto, durante el 2023 se valoraron 10.995 declaraciones de personas u hogares por eventos individuales y 467 declaraciones de eventos masivos. Esto permitió la inclusión de 382.674 personas en el Registro Único de Víctimas (RUV).
De hecho, uno de los logros significativos de este año fue la reducción en los tiempos de valoración de eventos masivos, pasando de 54 a 34 días hábiles en promedio. Esto facilitó la asistencia, atención y reparación de hogares víctimas de desplazamientos, confinamientos o ataques terroristas.
Como resultado de las mejoras a través de esta estrategia de caracterización, y en articulación con el Ministerio del Interior, se logró tener el censo más completo de las personas de la comunidad emberá en Bogotá, registrando 10.180 personas, de los cuales 5.091 son hombres y 5.089, mujeres.
El 51% de las personas incluidas en el RUV durante este año son mujeres y el 0,26% se autorreconocen con Orientación Sexual e Identidad de Género Diversa (OSIGD). El 34,04% de la población incluida tiene pertenencia étnica: 12,41% (47.480) víctimas son indígenas y el 21,54% (82.420) negras, afrocolombianas, raizales y palenqueras. Y el 3,08% (11.781) de las víctimas refirió tener alguna discapacidad.
Durante el 2023 se valoraron 93 declaraciones de comunidades étnicas, organizaciones o grupos sociales que resultaron en la inclusión de 84 Sujetos de Reparación Colectiva, de los cuales 77 son étnicos y 7 son no étnicos. Durante esta vigencia, destacamos la inclusión del Movimiento Sindical, el Pueblo Raizal del Archipiélago de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, y la localidad Sumapaz. Este último aún está en proceso de notificación.
Este año también se creó la estrategia Abriendo Escuela, dirigida al equipo encargado de valorar las solicitudes de inscripción en el RUV con el fin de fortalecer sus conocimientos y capacidades para evaluar las declaraciones y analizar el contexto teniendo en cuenta las nuevas dinámicas del conflicto armado.
Finalmente, el fortalecimiento de la articulación con entidades de nivel territorial y nacional sirvió para mejor la caracterización y focalización de la atención a las víctimas del conflicto armado. Por ejemplo, a nivel nacional, con la Jurisdicción Especial para la Paz y la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas, se logró armonizar los sistemas de información permitiendo la identificación de las víctimas reconocidas a través de los diferentes marcos normativos y garantizar la inclusión en el RUV de las que cumplieron con los criterios establecidos en la Ley de Víctimas.
Mientras que, en articulación con las entidades territoriales, se caracterizaron 339.919 personas a través del aplicativo de la Unidad para las Víctimas para conocer la situación socioeconómica de los hogares víctimas del conflicto armado. Esta información es esencial para medir la Subsistencia Mínima que determina la ayuda humanitaria que reciben las víctimas de desplazamiento, así como los Indicadores de Goce Efectivo de Derechos que permiten identificar cómo avanza el país en la superación del Estado de Cosas Inconstitucional.
Todas estas acciones realizadas durante la gestión de la Unidad para las Víctimas en el 2023 sirvieron no solo para agilizar los procesos de valoración y caracterización de las víctimas, sino también para brindar el reconocimiento que ellas merecen más allá de las cifras. La Unidad continuará con la implementación de estas acciones y herramientas con un único objetivo: humanizar cada vez más los datos del conflicto armado.
*Información con corte a 30 de noviembre de 2023.
En la Unidad para las Víctimas “Cambiamos para servir” con el objetivo de seguir trabajando en acciones de cara a la implementación de una política que contribuya a la superación de los rezagos, brinde una reparación transformadora y le permita a quienes han padecido el conflicto armado acceder efectivamente a sus derechos.
