Escudo de Colombia y texto de la Unidad para las Víctimas

Exadministradores de fincas bananeras reciben vehículo para impulsar su desarrollo socioeconómico

Esta entrega representa el camino hacia la reivindicación y el cumplimiento del Plan Integral de Reparación Colectiva de la Asociación de Administradores de Fincas Bananeras, conocida como Asafibu.

Entrega de camión a Asafibu.

La Unidad para las Víctimas entregó esta semana un camión a la Asociación de bananeros de Apartadó, conocida como Asafibu en cumplimiento del Plan Integral de Reparación Colectiva (PIRC).

La entrega se hizo en un acto protocolario en la placa polideportiva Magnoil Ayala de Apartadó, donde el vehículo fue bendecido por un sacerdote de la Iglesia Católica, según las creencias de este colectivo y afianzando, así, la convicción de este, en el paso que están dando hacia el fortalecimiento económico y la mejora de sus condiciones de vida.

Con este camión, valorado en 190 millones de pesos, Asafibu espera mejorar la capacidad para transportar y comercializar sus productos, destacando un camino hacia el desarrollo sostenible y la colaboración de efectiva entre la Unidad para las Víctimas y las demás entidades del Sistema de Atención y Reparación Integral a Víctimas (SNARIV).

El camión, modelo 2024 con carrocería de estaca, tiene una capacidad para transportar alrededor de siete toneladas, generará utilidades para el sostenimiento del colectivo, aprovechando las oportunidades de comercialización que se generan en la subregión, entre estas la producción bananera.

El representante legal de Asafibu, Uriel de la Ossa, recibió las llaves del vehículo de manos de la directora territorial de la Unidad para las Víctimas en Urabá-Darién, Leslie Paz Jaramillo. El dirigente demostró que le sobran fuerzas para seguir liderando las causas y metas que se ha propuesto la asociación, ya que su proyección incluye el legado a las nuevas generaciones, las familias de las y los 114 asociados.  

“Este camión, para nosotros, es el inicio del sueño que hemos tenido de una gran empresa. Es un orgullo para mí haber liderado este proceso hasta aquí. Me siento satisfecho, contento, después de superar inconvenientes, han sido compensados hoy con este gran inicio. Como nuestra vocación es la agricultura, el campo, nos enfocaremos en la producción agrícola y este camión nos va a permitir transportarlos, y también se va a poder producir en otras cosas, con algún contrato que hagamos con alguna bananera”, explicó el presidente de la asociación, Uriel de la Ossa.   

Para Aidee Torres, otra integrante de Asafibu, recibir este camión va más allá de los beneficios tangibles. “El impacto que causa es la credibilidad que hay en los procesos que estamos trabajando. Es una señal de esperanza de que todo va por buen camino y que realmente vale la pena la espera y la lucha”, añadió. 

Por su parte, la directora territorial de la Unidad para las Víctimas en Urabá-Darién destacó que la entrega del camión “va a ser muy importante para la continuidad de su proceso de reparación y, sobre todo, para la construcción de esta perspectiva de la no repetición, ante todo para sus familias, sus hijos y sus hijas”.

Es importante señalar que Asafibu es una organización constituida legalmente en 1987, pero su labor organizacional data de 1974 en Necoclí, Chigorodó, Carepa, Apartadó, Turbo, San Pedro de Urabá, Mutatá, San Juan de Urabá, Arboletes, y Vigía del Fuerte, Antioquia. En el 2013 iniciaron el proceso de reparación colectiva con la Unidad para las Víctimas.

Durante cinco años, Asafibu ha venido implementando este Plan Integral de Reparación Colectiva (PlRC), el cual consta de medidas de restitución, satisfacción, rehabilitación, y ganrantías de no repetición, permitiendo a esta comunidad abrirse a nuevos horizontes y visionar otros proyectos productivos, porque, aunque han pasado muchos años, no ha parado de trabajar y de reinscribir su historia, dejando atrás los sinsabores que les dejó el conflicto armado.

En la Unidad para las Víctimas “Cambiamos para servir” con el objetivo de seguir trabajando en acciones de cara a la implementación de una política que contribuya a la superación de los rezagos, brinde una reparación transformadora y le permita a quienes han padecido el conflicto armado acceder efectivamente a sus derechos.