Escudo de Colombia y texto de la Unidad para las Víctimas

Alianza para resarcir a víctimas de masacres en Ituango

Tras el reconocimiento de responsabilidad y la solicitud de perdón del Estado colombiano por las masacres de grupos de autodefensas en Ituango, la Unidad para las Víctimas coordina acciones para la reparación integral de las comunidades de los corregimientos El Aro y la Granja.

Esta semana se transportan por vía aérea y a lomo de mula más de 70 toneladas de materiales para las obras de mejoramiento de 21 viviendas en El Aro. “Hay algunas viviendas que fueron quemadas durante esta masacre en 1997 en la que murieron asesinadas 16 personas”, informó la directora de la Unidad para las Víctimas en Antioquia, Claudia Patricia Vallejo Avendaño. 

Y explicó que en esta alianza participan la “Empresa de Vivienda e Infraestructura de Antioquia, Empresas Públicas de Medellín, Ejército Nacional y Alcaldía de Ituango, para llevar estos insumos ya que, por carecer de una vía de acceso, no se había logrado”.

Justo hace 20 días en Medellín, los familiares de las víctimas y los sobrevivientes de las masacres reclamaron por inversión social “para saldar esa deuda histórica” con sus comunidades.

Una de ellas fue Miladys Restrepo, quien en ese acto escuchó al presidente Gustavo Petro pedir perdón en nombre del Gobierno y “reconocer que los muertos no eran enemigos de nadie; eran gente humilde y trabajadora”. El mandatario, además, anunció su compromiso para cumplir con los derechos a la verdad, la justicia y la reparación.  

Para ella fue significativo que la memoria de su hermano Wilmar fuera reivindicada. “Siento un alivio porque, cuando asesinaron a mi hermanito, me tocó ver a los paramilitares que le daban pata y decir que lo mataron porque era un guerrillero. Pero era un niño de 14 años”. Además de la pérdida de su hermano, el grupo de autodefensas robó el ganado e incendió la vivienda de su familia.

Por eso a Miladys pide que “reparen a las personas que todavía viven allá, nos cumplan con la carretera y mejorar las viviendas y nos ayuden a reconstruir nuestro pueblo”. 

Planes de reparación 

Como coordinadora del Sistema Nacional de Atención y Reparación, la Unidad para las Víctimas implementa las primeras acciones de un plan integral de reparación colectiva en el corregimiento La Granja y concierta el diseño del plan para El Aro. 

“Con estos planes también se da cumplimiento a la sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos de 2006 a favor del reconocimiento y resarcir los daños a las víctimas de las masacres en Ituango”, indicó la directora territorial Claudia Patricia Vallejo.

En la Granja, donde en 1996 las autodefensas asesinaron a cinco campesinos, se avanza con la estrategia de rehabilitación comunitaria Entrelazando, para la recuperación emocional y se proyectan dotaciones para la recuperación de prácticas deportivas, culturales, apoyo a proyectos productivos agrícolas y organizaciones campesinas.

Entre tanto, en El Aro, también se proyecta la construcción de la ansiada carretera entre el corregimiento y la zona urbana de Ituango y obras obras.  Con optimismo, Martha Inés Pozo, líder social de El Aro, dice que “esperamos que ahora se cumplan las promesas y la reparación”. En ese sentido valora “que traen materiales para las casas de las familias que se quedaron y se está haciendo la cancha muy bonita”.  

Otros proyectos priorizados por la comunidad en la formulación de su plan son el mejoramiento de las casetas comunales de varias veredas, la construcción del salón cultural, proyectos productivos agropecuarios (café y ganado) y la recuperación de tradiciones campesinas. 

En Ituango, la Unidad para las Víctimas ha invertido más de 34.000 millones de pesos para la reparación de la población afectada por el conflicto armado, incluidas 2.224 indemnizaciones individuales.

(Fin/JCM/CMC)