Eduardo Ávila Fonseca fue firmante del proceso de paz con el M-19 y posteriormente escolta de Carlos Pizarro hasta el día de su magnicidio. Fue posteriormente detenido desaparecido por personas que portaban insignias de la SIJIN en Chapinero en Bogotá.
A Eduardo lo torturaron y asesinaron en un país en donde la pena de muerte no existe. Su hermana Gladys en el proceso de búsqueda junto a la organización ASFADES, logró hitos importantes en materia de defensa de derechos humanos en Colombia, como el reconocimiento del delito de desaparición forzada. Este trabajo político le generó amenazas e intimidaciones, llevándola al exilio en Suecia.
En dos de cada diez presentamos: que la paz no les cueste la vida.