Escudo de Colombia y texto de la Unidad para las Víctimas

Don Fabio llegó a recibir su indemnización y a compartir su historia

Con la mirada puesta en sus manos, don Fabio* cuenta su historia como agricultor. Con orgullo evoca que él solito llegó a sacar siete cargas de café. “Con estas manos —dice—, le di vida a mucha tierra”. 

Todo sucedió en las montañas de Betulia (Antioquia), donde fue feliz en su parcela ‘El Descanso’, pero también donde vivió la tristeza plena. Ese choque de sentimientos se revela en sus frases entremezcladas que suelta a medida que recuerda lo sucedido.  

Don Fabio es un paisa de 74 años muy conversador y amable, que asistió a la jornada de entrega de la indemnización administrativa convocada para este miércoles y jueves por la Unidad para las Víctimas en Cali, y que recordó lo valiente que ha sido para sobreponerse a los embates de la guerra.  

“Dios nos da la fuerza para ser lo que queramos ser. Usted elige ser buena persona o no, yo elegí ser un hombre trabajador y seguir adelante, aunque con dolor”, sentencia.  

Cuenta que cuando la guerrilla de las Farc llegó a su territorio, dos de sus cuñados fueron asesinados y el alma se le volvió pedacitos con la muerte de una hija pequeña. La voz se le rompe pasando por ese pasaje de su vida, por el posterior desplazamiento a Medellín y por el desafío que significó rehacer su camino. 

Su yerno, quien lo acompaña, dice que la relación de Fabio con el campo es un matrimonio indisoluble, aunque ahora viven en la ciudad, en Palmira. Tiene sus plantas, su papayo, saca sus semillas y es buscado por los vecinos para reverdecer los jardines porque tiene muy buena mano. 

Don Fabio cree que el destino de la indemnización puede enfocarse en un lote cerca de la casa donde, con sus manos laboriosas que son su orgullo, pueda volver a sembrar cómodamente y conectarse con esa amorosa parte de su historia.  

Su memoria y valor, que se narran desde una esquina de la jornada, se tejen con las de otras 352 personas que pasarán por este mismo lugar, en la Fundación Centro Colombiano de Estudios Profesionales de Cali, para recibir sus cartas de indemnización entre miércoles 2 y jueves 3 de noviembre, las cuales suman un total de $2.708 millones.  

Todas estas víctimas del conflicto armado tienen algo que contar, y muchos de ellos, como don Fabio, llevan en su conversación lecciones de resiliencia para compartir al calor de un tinto. 

(Fin/LJA/COG/RAM) 

*Se omite el apellido a solicitud de la fuente.