“Mi amor, vamos a poder comprar la silla de ruedas eléctrica”, le dijo Lorena a su hija y ambas rompieron a llorar. Parecerá poca cosa para otros, aclara la madre, “pero para nosotras es mucho, es todo: son las piernas”.
Yenny Viviana nació con parálisis cerebral y le cuesta desplazarse. Tiene 29 años y el sentimiento siempre a flor de piel, en especial en días como este en el que recibe noticias que la hacen feliz. Hace tres años usa una silla de ruedas tradicional, porque la eléctrica sufrió un daño. Así le queda muy difícil acompañar a su mamá en la tienda para avisarle cada que llega un cliente, lo que le gusta mucho hacer.
“Salía de su pieza a atender a la gente y todos la saludaban. Ella necesita un espacio en la sociedad y esa silla se lo puede dar, porque se puede mover por ella misma”, explicó Lorena.
Este relato se conoció durante la más reciente jornada de entrega de cartas de indemnización en Cali y se tejió con otra historia, a escasos metros de su mesa. Se trataba de Gonzalo, de 93 años y sombrero paisa bien puesto. Con su hijastro como bastón acudió al llamado de la Unidad para las Víctimas y también recibió su carta de indemnización. Con esos recursos, dijo su hijo de crianza, garantizará que sus últimos años esté tranquilo, con los pañales, alimentos y medicamentos que necesita.
Y así sucesivamente, uno tras otro, fueron apareciendo más episodios en los que el cumplimiento de una medida de reparación tocó significativamente la vida de alguien. Ese fue el caso de Lorena y Yenny Viviana, así como de Gonzalo y el hijo que le regaló a vida.
Así van las cifras de las entregas
Esta jornada realizada en Cali esta semana, se sumó a otras seis efectuadas durante octubre que, además, llegaron a municipios como Buenaventura, Tuluá y Buga, a donde se convocó a 1.719 personas para la entrega de sus cartas de indemnización. Muchas de ellas hacen parte de la ruta prioritaria para el cumplimiento de esta medida por ser personas adultas mayores, estar en situación de discapacidad o tener alguna enfermedad huérfana, terminal o catastrófica.
En este balance de entrega de cartas de indemnización en octubre las cartas de indemnización para víctimas residentes en el Valle del Cauca suman recursos por 19.505 millones de pesos.
“Resaltamos el valor y la lucha detrás de cada persona y familia víctima del conflicto armado. Deseamos de corazón que este aporte a la reparación del daño que ocasionó la violencia se significativo y constituya un avance en la recostrucción de sus proyectos de vida”, señaló la directora territorial de la Unidad para las Víctimas en el Valle, Rosiris del Socorro Angulo.
En el Valle del Cauca se estima que hay 638.199 víctimas del conflicto armado. En lo que va corrido de la Ley de Víctimas, en este departamento se ha entregado 81.026 indemnizaciones por $626.559 millones.
En la Unidad para las Víctimas “Cambiamos para servir” con el objetivo de seguir trabajando en acciones de cara a la implementación de una política que contribuya a la superación de los rezagos, brinde una reparación transformadora y le permita a quienes han padecido el conflicto armado acceder efectivamente a sus derechos.
