En el corregimiento de San Adolfo se realizó la jornada de validación del documento de diagnóstico del daño, un informe que identifica las afectaciones colectivas ocurridas a causa de la violencia que afectó la región desde 1984 y que se extendió por 20 años.
Durante la actividad organizada y dirigida por el equipo de la Unidad para las Víctimas, dirección territorial Caquetá-Huila, participaron representantes del colectivo a quienes se les reconoce en el marco de este proceso como el ‘Comité de impulso’, además de líderes y presidentes de Juntas de Acción Comunal de veredas aledañas.
La validación del documento incluyó poner en consideración los aspectos descritos en jornadas anteriores, relacionados con las prácticas y proyectos colectivos, las formas de organización y relacionamiento, el autorreconocimiento y reconocimiento de territorio por terceros, los hitos y eventos que marcaron la vida de esta comunidad afectada por la guerra.
“Agradecidos con la Unidad para las Víctimas por este fortalecimiento en medio de nuestra reparación colectiva, un balance positivo porque nos ayuda a fortalecernos más como comunidad en medio de este proceso, ya que veníamos inquietos de no seguir avanzando. Gracias también al arduo valor que tiene la comunidad y que expresa ese sentimiento de ser una región donde se respira paz, café y guácharos”, expresó Fredy Quitián Gutiérrez, representante de la comunidad.
Previo a la firma del acta que da por culminada esta fase se adelantó un espacio simbólico. Allí los participantes acudieron con productos representativos de la región, recordando su arraigo e identidad como sanadolfeños.
San Adolfo es la única comunidad en el departamento del Huila reconocida como Sujeto de Reparación Colectiva desde una perspectiva material, política y simbólica.
En la Unidad para las Víctimas “Cambiamos para servir”, con el objetivo de seguir trabajando en acciones de cara a la implementación de una política que contribuya a la superación de los rezagos, brinde una reparación transformadora y le permita a quienes han padecido el conflicto armado acceder efectivamente a sus derechos.
