Comunidades afro víctimas del conflicto recibieron más de 9.000 millones de pesos para su indemnización colectiva

La Unidad para las Víctimas destinó estos recursos entre agosto de 2022 y abril de 2024, focalizándolos en 18 Sujetos de Reparación Colectiva afros ubicados en el Pacífico, Caribe, Antioquia, Tolima y Putumayo.

Avanza la reparación de las comunidades afro que han sufrido los impactos del conflicto armado. Entre agosto de 2022 y abril de 2024, la Unidad para las Víctimas ha destinado 9.586 millones de pesos para el pago de indemnizaciones colectivas de 18 Sujetos de Reparación Colectiva afros, negros, raizales y palenqueras ubicados en los departamentos del Pacífico, la región Caribe, Antioquia, Tolima y Putumayo.

Para Sandra Alfaro, directora técnica de Reparación de la entidad, La corresponsabilidad de las entidades que conforman el Sistema Nacional de Atención y Reparación Integral a las Víctimas (SNARIV) y los entes territoriales “han sido clave para avanzar conjuntamente en el proceso de reparación colectiva”.

En ese contexto, la Unidad para las Víctimas ha liderado concertaciones y diálogos con las comunidades afectadas para comprender los daños a largo plazo, pero desde una perspectiva territorial y étnicocultural para fortalecer lo que la guerra también rompió: la confianza entre las comunidades y la institucionalidad.

De hecho, el año 2023 fue en el que más se estructuraron Planes Integrales de Reparación Colectiva (PIRC) de comunidades negras, afrocolombianas, raizales y palenqueras. La formulación de estos planes implica varias etapas que las comunidades transitan en compañía de la entidad. La identificación del Sujeto de Reparación Colectiva, diagnóstico participativo del daño, la formulación concertada del plan, implementación y seguimiento hacen parte de este proceso en el que, justamente, se contemplan las indemnizaciones colectivas, un derecho garantizado para los sujetos étnicos.

Asimismo, a 30 de abril de 2024, la entidad ha incluido 264 sujetos de reparación colectiva de estas comunidades en el Registro Único de Víctimas. En esto se destaca la inclusión del pueblo raizal como Sujeto de Reparación Colectiva, reconociendo y tomando medidas para reparar los daños sufridos por la violación de sus derechos individuales y colectivos, incluyendo su maritorio.

En el ámbito de la reparación individual, en 2023 se emitieron 50.585 giros de indemnización, beneficiando territorios como Buenaventura, Quibdó y Bojayá, no solo con medidas administrativas, sino también con medidas judiciales a través del Fondo para la Reparación de las Víctimas, indemnizando daños cometidos por los bloques paramilitares en estos territorios.

La Unidad para las Víctimas también ha abordado el enfoque psicosocial, con la meta de incluir 20.000 integrantes de comunidades negras y afrocolombianas en sus procesos anualmente. Además, se han incorporado reconocimientos étnicos en conmemoraciones como el Día de la Afrocolombianidad y Día Internacional de la Eliminación de la Discriminación Racial.