Doce Consejos Comunitarios de Buenaventura avanzaron en la formulación y el diseño de sus Planes Integrales de Reparación Colectiva (PIRC), que se convertirán en su hoja de ruta para contribuir en la reparación de los daños que les dejó el conflicto armado.
Las comunidades de Cuenca Baja del Río Calima; del Río Dagua, Pacífico, Cimarrón, Cisneros; Alto y Medio Dagua, Mayor de Anchicayá; La Plata; Bahía Málaga; Córdoba San Cipriano; La Gloria; Río Naya; Río Cajambre; Río Raposo; Mayorquín y Citronela hicieron parte de este proceso que permitió avanzar en la ruta de reparación colectiva.
“Es muy importante que nos miremos como seres humanos, que trabajemos por la colectividad, por esas medidas de rehabilitación y reparación y las garantías de no repetición. Es importante que las cosas que necesitamos quedan insertadas en los planes para la reparación, que la gente vuelva a creer, que le llegue la oportunidad de reparar esos daños a esas comunidades empobrecidas que todo lo han perdido. Más allá de la recuperación, queremos seguir soñando y seguir viviendo”, dijo Luz Dary Santiesteban, del Consejo Comunitario de la vereda La Gloria.
Por su parte, Rosiris del Socorro Angulo, directora territorial de la Unidad para las Víctimas en el Valle del Cauca, resaltó la importancia de este esfuerzo, “avanzar en el cumplimiento de nuestros compromisos con la Unidad, es reconstruir confianza con los sujetos y apuntar a acciones que permitan dinamizar los territorios y lograr alternativas para las comunidades”.
Asimismo, la directora territorial profundizó sobre cuáles son las acciones que las comunidades esperan se hagan realidad, “es valioso resaltar que todas esas medidas contempladas por la comunidad dan relevancia a las acciones de protección frente a su identidad y procesos culturales, así como sus danzas, fiestas patronales e intercambios de saberes”.
Temas recomendados
Entre los aspectos señalados como prioritarios por las comunidades para hacer parte de sus planes de reparación colectiva están la inversión en infraestructura social y comunitaria, instituciones educativas y apoyo a procesos organizativos y culturales que permitan seguir fortaleciendo a las comunidades.