Aeropuerto de Florencia, Caquetá, fue vitrina de emprendimientos de víctimas del conflicto armado 

El aeropuerto Gustavo Artunduaga Paredes, de la capital caqueteña, fue epicentro de la feria de moda ‘Hasta que la paz se vuelva tendencia’, un espacio para dar a conocer las iniciativas productivas de las víctimas de esta región del país.

Ocho marcas de emprendedores sobrevivientes del conflicto armado se unieron a otras doce iniciativas productivas de Florencia, Caquetá, en el espacio denominado ‘Hasta que la paz se vuelva tendencia’ organizado por la Aeronáutica Civil en el aeropuerto Gustavo Artunduaga Paredes de la capital del Caquetá, con el apoyo de la Unidad para las Víctimas y la Agencia para la Reincorporación y la Normalización. 

La actividad congregó a cerca de 300 personas, entre viajeros, comunidad y expositores, éstos últimos mostraron su arte en diferentes vitrinas y a través de una pasarela de propuestas textiles y artesanales, alusivas a la biodiversidad, la tradición étnica y la cultura en general. 

Lesdy Marlody Rodríguez Quiñones, directora territorial de la Unidad para las Víctimas en Caquetá aseguró que: “la generación de ingresos es una de nuestras apuestas hacia la reparación, aportar a la dignificación de los derechos de nuestra población sobreviviente del conflicto a través de alianzas estratégicas en espacios diferentes, innovadores, que les permitan proyectarse, visionar, crecer, hacer contactos y cerrar negocios que les permitan reafirmar sus iniciativas para el mejoramiento de su calidad de vida”. 

Por su parte, Fernanda Ramírez Murcia, emprendedora con su marca Detalles Ramírez, uno de los emprendimientos participantes del sector de bisutería, dijo: “Por medio de nuestros collares reflejamos el espiral del fuego, el paisaje, las mariposas y su libertad, la transición, ya que después del desplazamiento somos libres, porque nos sentíamos atrapados. Creemos que el daño está hecho, pero como empresaria y artesana, tratamos de mostrar lo que fue la violencia a través de nuestros accesorios e identificamos lo que hemos reconstruido, renacer en lo personal, en lo cotidiano”. 

Y agregó: “Agradecemos el espacio que nos permitió darnos a conocer, para mí es muy satisfactorio poder mostrar mi emprendimiento, la actividad fue muy bien organizada; realicé algunos contactos y estamos en negociaciones para entrega de pedidos”. 

Desde la gerencia del aeropuerto Gustavo Artunduaga Paredes, en cabeza de Diana Montes Zabala, se destacó la actividad como una oportunidad de mostrar este escenario no solo como lugar de paso, sino de nuevas oportunidades para emprendedores, quienes han aprendido a vender sus productos y a dar a conocer sus historias propiciando un espacio acogedor y gratificante. 

La Unidad para las Víctimas continúa promoviendo alianzas importantes con el sector público y privado buscando potenciar las iniciativas que sean reflejo de resistencia, resiliencia, arraigo y productividad en el departamento de Caquetá.