Como medida de su reparación integral, durante este año, la Unidad para las Víctimas entregó 3.125 indemnizaciones económicas por casi 35.000 millones de pesos a víctimas del conflicto armado de los 23 municipios del oriente antioqueño.
“Las últimas jornadas de 2023 a cargo de la Unidad para las Víctimas, con apoyo de las alcaldías, se cumplieron en San Carlos, San Rafael y en Rionegro para completar 610 personas beneficiadas durante diciembre”, informó directora de la entidad en Antioquia, Claudia Patricia Vallejo Avendaño.
Adultos mayores, con enfermedades graves, discapacidades, campesinos y mujeres cabeza de familia son los principales beneficiados con la notificación del del giro de estos dineros.
En su mayoría sufrieron hechos victimizantes como desplazamientos forzados, homicidios y desaparición forzada de familiares, secuestros, lesiones personales, perdida de bienes y violencia sexual, entre otros delitos perpetrados por grupos armados.
Según la directora territorial, “la entrega de estas indemnizaciones se complementa con la orientación para una adecuada inversión de estos dineros públicos para apoyar sus proyectos y mejorar sus condiciones de vida”.
Con ese fin, conocieron la oferta interinstitucional para superar la vulnerabilidad causada por la violencia, en temas de su interés como vivienda, educación superior, ahorro, pensiones, fortalecimiento o emprendimiento de negocios.
Balance de atención y reparación
La población del oriente antioqueño fue una de las más afectadas por el conflicto armado, pero también una de las más favorecidas con la inversión para su reparación. “El total histórico registra que 52.774 indemnizaciones económicas han sido adjudicadas a víctimas por valor superior a los 392.000 millones de pesos”, indicó Vallejo Avendaño.
A esto se sumala implementación de proyectos de proyectos productivos, obras de infraestructura comunitaria y otras medidas reparadoras como la atención sicosocial y los planes de reparación colectiva y de retornos y reubicaciones de desplazados en municipios como Granada, San Luis, San Carlos, San Rafael, San Francisco, San Vicente Ferrer, Argelia, Cocorná, Nariño, Carmen de Viboral.
Gracias a estos planes, más de 5.000 personas fortalecieron sus cultivos y desarrollar proyectos piscícolas, porcícolas y avícolas con los insumos agrícolas (semillas, herramientas, abonos) y los animales (cerdos, alevines, aves).
Las comunidades también se beneficiaron con equipamiento deportivo, cultural (uniformes, implementos, balones, instrumentos musicales) y dotaciones mobiliarias y tecnológicas para el mejoramiento de escuelas rurales, casas de la cultura, canchas polideportivas, casetas comunitarias y centros de salud.
Además, se concluyó la pavimentación de la Vía de la Reconciliación entre San Carlos y Granada, una obra reclamada hace décadas por los dos municipios y priorizada como una acción del plan de reparación colectiva de las víctimas.
En la Unidad para las Víctimas “Cambiamos para servir” con el objetivo de seguir trabajando en acciones de cara a la implementación de una política que contribuya a la superación de los rezagos, brinde una reparación transformadora y le permita a quienes han padecido el conflicto armado acceder efectivamente a sus derechos.
