En las instalaciones del Club Los Lagos de la ciudad de Neiva se realizará el taller ‘La ética de escuchar vidas y narrar historias en el sur’, un espacio de formación, diálogo y reflexión dirigido a comunicadores, periodistas y estudiantes de comunicación social, sobre el rol que desempeñan en el abordaje de historias asociadas a la paz y el conflicto armado en este territorio.
La actividad dará inicio el jueves 25 de abril de 2024 desde las 2:00 p.m. hasta las 5:30 p.m., y finaliza el viernes 26 de abril desde las 9:00 a.m. hasta las 12:00 p.m.; abordando cuatro módulos relacionados con: El concepto de víctimas y sobrevivientes, el enfoque de género y de derechos humanos en el periodismo, la socialización de casos de abordajes periodísticos que se han convertido en evidencias judiciales, y finalmente, se entregarán herramientas para contar historias con aportes a la dignificación de las víctimas, contribuyendo a su reparación integral.
“Este es un espacio que nos permite acercarnos a los periodistas y a los comunicadores en esa ardua tarea que tienen de presentarnos esas duras realidades de nuestro territorio, y es una oportunidad, un llamado a dignificar, a reconocer y a valorar esas historias; queremos agradecer a todos los que se han sumado y esperamos compartir herramientas que sean de gran utilidad en el quehacer periodístico”, aseguró Lesdy Marlody Rodríguez Quiñones, directora territorial de la Unidad para las Víctimas en Caquetá y Huila.
Temas recomendados
El taller se hace posible y se acreditará gracias a la articulación entre la Universidad Surcolombiana, a través del Centro de Investigación Social, la Coordinación de Investigación y Proyección Social de la Facultad de Ciencias Sociales y Humanas; la coordinación en Neiva de la ONU, la Unidad de Búsqueda de Personas Dadas por Desaparecidas (UBPD), el Observatorio Surcolombiano de Derechos Humanos (OBSURDH), y la Unidad para las Víctimas.
Cupos limitados e inscripción gratuita aquí
En la Unidad para las Víctimas cambiamos para servir, trabajamos para reivindicar la memoria viva a través de las voces de esperanza y resistencia de hombres y mujeres víctimas que han camino para su dignificación y las de sus familias, comunidades y procesos; ellas y ellos han demostrado que, a pesar de su dolor, tienen el poder de brindarle a Colombia segundas oportunidades para alcanzar la paz, la reconciliación y la convivencia.