La Unidad para las Víctimas en Cauca mostró avances en el desarrollo de la gestión, las acciones y los resultados obtenidos a partir de la implementación de la política pública de atención, asistencia y reparación Integral a las víctimas del conflicto armado.
En lo referente a la reparación colectiva, se logró la protocolización de seis Planes Integrales de Reparación Colectiva (PIRC) de los sujetos Consejo Comunitario Cuenca del Río Cauca y Microcuencas de los Ríos Tetas y Mazamorrero de Buenos Aires; Pueblo de Kisgó de Silvia; Consejo Comunitario de Aganche y Consejo Comunitario Asnazú de Suárez; Consejo Comunitario Barranco de Corinto y el Resguardo Indígena de Aguas Negras de Morales, los cuales proyectan la implementación de medidas que benefician a más de 22.000 víctimas del conflicto armado en los sectores educativo, político organizativo, ambiental, infraestructura, agrícola, cultural, entre otros.
Más de 9.000 víctimas en su mayoría habitantes de zonas rurales de difícil acceso, han recibido atención directa y constante en los nuevos Puntos de Atención a Víctimas (PAV) ubicados en las cabeceras municipales de Morales, Buenos Aires, Suárez y Almaguer donde la población ha contado con la facilidad, en tiempo y recursos de movilidad, de acceder a trámites y servicios pertinentes con la entidad y que están directamente relacionados con las medidas de asistencia, atención y reparación a víctimas.
En el presente periodo un total de 141.595 víctimas del conflicto armado realizaron trámites ante la Unidad, durante el desarrollo de 45 jornadas de atención móvil en los 42 municipios del Cauca, en los 11 puntos de atención a víctimas y en los centros regionales atención a víctimas de Santander de Quilichao y Popayán.
Durante el año 2023, se indemnizaron, por vía administrativa a 5.536 víctimas del conflicto armado en 40 municipios del departamento, a quienes se les realizaron giros por un total de 55.000 millones de pesos ($55.398.509.992). En las jornadas de entrega de cartas también se asesoró y orientó en inversión adecuada de recursos a 1.738 víctimas del conflicto.
Con respecto a la ayuda y atención humanitaria inmediata, en este departamento se garantizó la atención oportuna e integral a 18 eventos de desplazamiento forzado y confinamiento en las que estuvieron involucradas más de 5.087 personas en los municipios de Argelia, Miranda, Balboa, Jambaló, Caldono, Silvia, Buenos Aires, López de Micay y Popayán a quienes se les entregaron 2.414 kits de alimentos y aseo.
En cuanto a la gestión de proyectos, la Unidad para las Víctimas formuló y ejecutó en asistencia técnica a las administraciones municipales, proyectos como la dotación a 21 sedes educativas en los municipios de Argelia y El Tambo por un valor que supera los 162 millones de pesos, beneficiando a más de 800 estudiantes.
Además, se entregaron insumos agrícolas a 259 unidades productivas de víctimas del conflicto armado en los municipios de Argelia, Morales y Guapi, que suman más de 190 millones de pesos, con lo que se apoya la generación de ingresos entre población víctima.
Se destaca en este periodo, la elección de las mesas de participación efectiva de víctimas del departamento y de sus 42 municipios, en las que la población víctima, a través de 693 representantes, inciden en la implementación de la política pública de víctimas, de los cuales 191 representan enfoques diferenciales y los diferentes hechos victimizantes, además de contar con tres integrantes en la Mesa Nacional elegida en diciembre.
En este sentido, se resalta el acompañamiento que hace la Unidad para fortalecer la participación de las mesas, lo que ha permitido incluir en sus planes de trabajo, actividades de capacitación en diseño, elaboración e implementación de proyectos sociales que promueven la autogestión de recursos y la visibilización de las organizaciones de víctimas.
Frente a la medida de rehabilitación psicosocial, mediante la Estrategia de Recuperación Emocional Grupal (EREG), en el Cauca se han atendido 197 víctimas, así mismo, se ha realizado la atención a 79 víctimas del conflicto armado con la medida de rehabilitación psicosocial mediante la estrategia de recuperación emocional individual que se realiza desde los Centros Regionales de Atención a Víctimas (CRAV) de Santander de Quilichao y Popayán.
En la Unidad para las Víctimas “Cambiamos para servir” con el objetivo de seguir trabajando en acciones de cara a la implementación de una política que contribuya a la superación de los rezagos, brinde una reparación transformadora y le permita a quienes han padecido el conflicto armado acceder efectivamente a sus derechos.
