La Unidad para las Víctimas dio asistencia técnica sobre la implementación de la política pública de víctimas, la socialización del protocolo de participación de los niños, niñas y adolescentes y la socialización de la Ley 2343 del 2023 a las y los integrantes de la Mesa Municipal de Víctimas de Ayapel, Córdoba.
En las jornadas se abordaron temas como la contextualización de la política pública de víctimas, el proceso de certificación territorial y los resultados preliminares de la vigencia 2024 además de la socialización de lineamientos para la implementación del protocolo de participación de niños, niñas y adolescentes, así como los lineamientos para la formulación de los planes de contingencia.
Según Avinael Lozano, coordinador de la Mesa Municipal de Participación Efectiva de Víctimas de Ayapel “estos espacios son importantes porque nos permiten afianzar nuestros conocimientos para trabajar conjuntamente desde las entidades territoriales en pro de las víctimas y para enriquecer la respuesta inmediata ante las alertas tempranas”.
La asistencia técnica tiene como fin acompañar a las entidades en la planeación, ejecución y seguimiento a la implementación de la política pública de víctimas. Además, busca destacar la importancia de conocer quién es respondiente de la implementación ejecución y seguimiento de la misma para que desde la construcción de los planes de acción territorial, se puedan anualizar los programas que ejecutan en cada vigencia, focalizar a la población víctima beneficiaria de cada oferta y cargar las bases de beneficiarios que efectivamente acceden a cada uno de sus programas.
“Este ejercicio que hemos hecho con el apoyo de la Unidad para las Víctimas nos permite ampliar nuestra mentalidad y tener mayor claridad con respecto a la incidencia que debemos tener frente a la política pública de víctimas”, añadió Ludis Margarita Díaz, representante del hecho victimizante integridad física y psicológica del municipio de Necoclí, Antioquia.
Iris Barbutia, quien es cuidadora de menores, destacó la importancia de la asistencia y la calificó como constructiva y transformadora porque desconocía cómo ser influyente ante una alerta temprana: “Es un aprendizaje y fortalecimiento para seguir adelante y sobrellevar la tarea como guiadora y cuidadora de menores”.
Dentro de los lineamientos para la implementación del protocolo de participación de niños, niñas y adolescentes, fueron socializaron los riesgos que enfrentan en medio del conflicto armado.
Como parte de sus tareas, la Unidad para las Víctimas realiza constante acompañamiento a los enlaces municipales de víctimas y a las mesas de participación efectiva de víctimas para que la población víctima de Córdoba construya escenarios de diálogo y beneficio. Asimismo, continuará liderando el fortalecimiento a las entidades territoriales, para garantizar la implementación de la política pública de víctimas en los diferentes municipios.
En la Unidad para las Víctimas “Cambiamos para servir” con el objetivo de seguir trabajando en acciones de cara a la implementación de una política que contribuya a la superación de los rezagos, brinde una reparación transformadora y le permita a quienes han padecido el conflicto armado acceder efectivamente a sus derechos.
