La dirección territorial Atlántico de la Unidad para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas lideró el proceso de articulación para avanzar en el análisis del plan integral de reparación a los miembros del pueblo kankuamo que hoy están asentados en el Atlántico, tras haber sido desplazados de su territorio original por el conflicto armado.
La jornada fue impulsada por la directora encargada, Miledy Marcela Galeano, y el grupo de funcionarios de Asuntos Étnicos y Reparación Colectiva.
Durante la jornada que se desarrolló en Barranquilla, el director territorial César-Guajira, Víctor Hugo Mosquera Galvis, dio a conocer los avances del plan integral de reparación colectiva (PIRC) que se convierte en una hoja de ruta para cumplirle a la población afectada.
En ese mismo espacio participó el gobernador cabildo del del pueblo kankuamo Jaime Luis Arias, quien afirmó que la socialización de los avances del PIRC para su pueblo es un paso importante para la preservación de su existencia como uno de los cuatro pueblos de la Sierra Nevada que conviven en nuevos territorios por circunstancias ajenas a su decisión inicial.
Según las cifras dadas a conocer durante la reunión, los kankuamos asentados en Barranquilla son 141 familias y se estima que en Soledad conviven otras 50 que fueron caracterizadas en el año 2020. El mayor desplazamiento de kankuamos al Atlántico se dio durante los años 1998 y 1999 y se prolongó hasta 2005.
El gobernador manifestó que los avances en el marco del PIRC tuvo una fase de consultas previas que se realizaron con base en la Sentencia T025 de 2004 y el auto 004 de 2009 que ordena el Plan de Salvaguarda Étnica que acordó medidas para resolver la situación de vulneración por el desplazamiento.
En la identificación del daño para hacer los aportes acerca de cómo pueden contribuir al proceso de reparación se destaca la necesidad de salvaguardar los valores culturales e identidad étnica; las alternativas de garantías productivas y la atención en salud y atención sicosocial.
Afirmó que los kankuamos no están interesados en desplazarse por todo el territorio nacional, ni quieren estar en lugares diferentes a su tierra natal, ya que según él fueron las circunstancias las que generaron un desplazamiento que como pueblo los obligó a organizarse para no seguir perdiendo la identidad.
“En el territorio del Atlántico hay otros pueblos ancestrales que tienen asiento y no queremos disputar ese territorio. Desde el ejercicio autónomo de representación queremos concertar acciones conjuntas con las autoridades para avanzar en el proceso de construcción del plan integral de reparación colectiva”, concluyó.
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