Escudo de Colombia y texto de la Unidad para las Víctimas

Finalizó piloto para prevenir el reclutamiento forzado en Nariño

El piloto nacional ‘Proyecto Nariño’, busca atender la problemática que se está presentando en Nariño, con la vinculación de niños, niñas y adolescentes, a actividades relacionadas con grupos armados.

Cierre del piloto nacional ‘Proyecto Nariño’.

Barbacoas, El Charco, Francisco Pizarro, Tumaco, Roberto Payán y Mosquera, en Nariño, fueron los municipios elegidos para el piloto del ‘Proyecto Nariño’, que implementa una metodología de intervención en el territorio para la prevención del reclutamiento forzado de niños, niñas, adolescentes y jóvenes.

Dentro de este proceso, 196 personas fueron certificadas en la estrategia ‘Proyectándonos’, que hace parte del proyecto que busca ser puesto en marcha en el resto de Colombia.

El proyecto, que está articulado con la Agencia de Renovación del Territorio (ART), Colombia Transforma y la Unidad para las Víctimas, busca contribuir con la reparación integral de las víctimas, la reconciliación, la convivencia y la construcción de paz a través de la inclusión de sujetos de especial protección constitucional y de la implementación de estrategias con enfoque de derechos.

La actividad fue liderada por la Unidad para las Víctimas con la participación de la Agencia de Renovación del Territorio (ART), la Asociación de Personeros del Pacífico (Asoperpac) y las alcaldías de Tumaco, Barbacoas, Roberto Payán, El Charco, Mosquera y Francisco Pizarro, con el apoyo de Cooperación Internacional y Colombia Transforma.

Respecto al cierre de este programa en el departamento, la directora territorial de la Unidad para las Víctimas en Nariño, Sandra Sarria Cruz, señaló que: “Es importante trabajar en estrategias que nos ayuden a combatir esta situación del reclutamiento forzado; trabajar en herramientas que nos permitan generar posibilidades para que nuestros niños, niñas, adolescentes y jóvenes. Que no sean engañados y utilizados para hacer parte del conflicto que se viene presentando, en este caso, en la costa Pacífica nariñense”.

Para María Angélica Sinisterra, estudiante participante en el proyecto, estas estrategias aportan al desarrollo personal. “Roberto Payán necesita convertirse en un territorio de paz y que las personas puedan disfrutar de él y gracias a estas iniciativas podemos cambiar la manera de pensar de los adolescentes del municipio”, señaló.

El personero de Francisco Pizarro, Luis Alberto Tenorio, indicó: “Este proyecto es importante para las comunidades de nuestro territorio y para que las instituciones apoyen los procesos que vinculen a la población joven para su desarrollo integral”.

La secretaria de Gobierno de El Charco, Aura Mercedes Pérez, manifestó: “Nuestro contexto es muy complejo y sabemos que el conflicto está día a día en nuestro territorio, y pues qué bien que con esta estrategia se pueda mitigar este flagelo y entregándoles herramientas a los jóvenes para enfrentar las situaciones”.

De igual manera, el docente Sacarías Godoy, de la institución educativa San José del Telembí, expresó que: “Mitigar y prevenir el flagelo del reclutamiento forzado es importante en nuestro territorio y logramos articular de manera transversal con la formación que reciben los estudiantes estas iniciativas de prevención”.

En la Unidad para las Víctimas “Cambiamos para servir” con el objetivo de seguir trabajando en acciones de cara a la implementación de una política que contribuya a la superación de los rezagos, brinde una reparación transformadora y le permita a quienes han padecido el conflicto armado acceder efectivamente a sus derechos.