Escudo de Colombia y texto de la Unidad para las Víctimas

Comunidades de Unguía se integran en torneo deportivo como actividad reparadora

En el marco del Plan Integral de Reparación Colectiva (PIRC) del Consejo Comunitario Mayor del Bajo Atrato - Cocomaunguia, Chocó, se realizaron encuentros deportivos en los que participaron comunidades de Tarena, Roto, Tumaradó, Marriaga, Puerto y Ticole.

Torneo de Cocomaunguía en Chocó.

La cancha de fútbol de la comunidad del Puerto en Unguía, Chocó, fue el escenario del esperado torneo de balompié, organizado por este Consejo Comunitario como medida del Plan Integral de Reparación Colectiva (PIRC), apoyado por la Unidad para las Víctimas, que se encargó de la logística de la jornada.

El torneo convocó a jóvenes de las comunidades de Tarena, Roto, Tumaradó, Marriaga, Puerto y Ticole, pertenecientes al Consejo Comunitario, quienes se venían preparando para participar de estas competencias deportivas tradicionales en su territorio, pero que, a causa del conflicto armado, se suspendieron.

Más que una competencia que incluía trofeos para los equipos ganadores y medallas para todos los y las  participantes, con premios especiales para el primer, segundo y tercer puesto, las comunidades celebraron este fin de semana el hecho de retomar los espacios y fortalecer los lazos comunitarios.

“Nos sentimos muy agradecidos por el apoyo. Por primera vez, se hace este campeonato de esta magnitud, donde acudieron 240 personas. Se entregaron premiaciones a todas las comunidades. Agradecemos a la junta directiva y a todos los que hicieron parte de esta logística”, resaltó Ferny Medrano, integrante del comité deportivo.

Las 2.184 personas que integran este Consejo, asentado en el río Atrato, fueron convocadas en torno a los encuentros deportivos, que comenzaron con los equipos masculinos y femeninos de las seis comunidades, siguiendo las tradiciones y los lineamientos establecidos por los delegados del torneo.

Como parte de la clausura del torneo, se incluyó una presentación artística de ‘chirimía’, que enriqueció la celebración al preservar las tradiciones ancestrales y el folclor del territorio afro.

El conflicto armado afectó también las formas de relacionamiento cultural, las actividades comunitarias y de sostenimiento económico de estas seis comunidades. Por este motivo, en el Plan Integral de Reparación Colectiva (PIRC) se incluyeron varias medidas de restitución, que ya se han hecho efectivas como la entrega de un bote-taxi para transporte en la comunidad y de kayaks para reactivar el deporte tradicional e involucrar a as y los jóvenes en esta disciplina.

De igual manera, mediante este Plan Integral de Reparación Colectiva (PIRC), las comunidades recibieron dotaciones tecnológicas y mobiliario escolar, herramientas agropecuarias. Una de las más recientes medidas implementadas, se ejecutó mediante la construcción y entrega de dos centros comunitarios, un esfuerzo conjunto con el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), la alcaldía municipal y, la comunidad del Consejo Comunitario.

En la Unidad para las Víctimas “Cambiamos para servir” con el objetivo de seguir trabajando en acciones de cara a la implementación de una política que contribuya a la superación de los rezagos, brinde una reparación transformadora y le permita a quienes han padecido el conflicto armado acceder efectivamente a sus derechos.