Con el objetivo principal de restablecer el tejido social, la capacidad organizativa y reconstruir la confianza entre los vecinos se cerró el Plan Integral de Reparación Colectiva (Pirc) con la participación de los habitantes y del Comité de Impulso del corregimiento La Habana, de Guadalajara de Buga, en el Valle del Cauca.
El sujeto colectivo, compuesto por las veredas Alaska, La Magdalena, La Piscina, Las Frías, El Diamante, El Janeiro, La Habana y Alto Cielo, cuenta con un promedio de 2.800 habitantes que se dedican principalmente a la agricultura y a las actividades comerciales, turísticas, gastronómicas y de servicios.
Desde la fecha de aprobación de su plan, el 20 de septiembre de 2014, la comunidad comenzó a trabajar en las 44 medidas concertadas para el restablecimiento de sus derechos: seis de garantías de no repetición para que lo sucedido no vuelva a ocurrir; una de rehabilitación, que contribuye a la reconstrucción del tejido social; 26 de restitución, para el restablecimiento de las condiciones materiales y sociales y 11 de satisfacción, que dignifican y reconocen el buen nombre de los colectivos.
Una de las acciones destacadas se realizó en septiembre de 2019, momento en que la Unidad para las Víctimas le entregó a esta comunidad herramientas, insumos agrícolas, fertilizantes, semillas, alevinos de trucha y mojarra, como parte de las acciones de su plan, para lo cual contó con el apoyo de la Secretaría de Agricultura y Fomento de Buga, que brindó asistencia técnica.
La inversión realizada para cumplirle a la comunidad con el total de las acciones incluidas en el plan supera los 483 millones de pesos, que contempló dentro de las medidas de restitución: la capacitación, dotación y producción de abonos orgánicos, hortalizas, plantas aromáticas y plantas medicinales; recuperación, adecuación y dotación del trapiche panelero; instalación del mercado campesino; capacitaciones en liderazgo como gestores ambientales; recuperación forestal, reparación de vías de acceso a las veredas; parque temático; adecuación y restauración de la casa de la Junta de Acción comunal y celebraciones religiosas que se habían perdido por el conflicto armado.
Dentro de las medidas de rehabilitación la entidad desarrolló la implementación de la estrategia para la rehabilitación comunitaria y reconciliación social Entrelazando.
En las medidas de satisfacción resaltan las solicitudes de perdón público por parte de los actores armados que afectaron el territorio y la promoción del esclarecimiento de los hechos; el impulso de eventos deportivos y culturales.
Por otra parte, dentro de las medidas de garantías de no repetición se brindaron protección a líderes comunitarios, orientaciones sobre seguridad ciudadana y prevención del delito, entre otras.
El acto de cierre contó con la participación de los integrantes del Comité de Impulso, de los tejedores y las tejedoras, las juntas de acción comunales de cada vereda, la comunidad en general, la Asociación de Productores Agroambientales del Diamante (ASOPAAD), la Asociación de Mujeres Productoras de Plantas Medicinales (APROPLAM), la Asociación Campesina por la Reparación y la Paz (ACRP La Habana), el mercado campesino y la Unidad para las Víctimas. También participaron entidades como la Alcaldía de Guadalajara de Buga, la personería y miembros de la Gobernación del Valle del Cauca, del Ejército Nacional y la Policía Nacional.
