Escudo de Colombia y texto de la Unidad para las Víctimas

Las tres grandes tareas de la Dirección Territorial Valle del Cauca en el 2021

Un año de importantes avances en los procesos de reparación colectiva y de acercar nuestros servicios a la comunidad, pese a las dificultades que impuso la pandemia, entre otros logros, fue el 2021 en la Dirección Territorial Valle del Cauca de la Unidad para las Víctimas.

Luz Adriana Toro Vélez, directora territorial, indicó que en lo que tiene que ver con reparación colectiva en este departamento se cristalizaron logros como la culminación de todo el proceso de reparación integral con la comunidad de Arenillo, Palmira.

“Esto fue muy significativo para nosotros, pues vivimos de la mano con esta población ese camino de fortalecimiento tan hermoso que hoy se traduce en solidaridad, confianza, esperanza y unos proyectos productivos que están rodando”, dijo la funcionaria. 

Además, destacó que se avanzó en la implementación de los planes integrales de reparación colectiva de las comunidades campesinas de Arenillo (Pradera), La Habana (Buga,) Líbano (Pradera), El Queremal (Dagua) y Buenos Aires (San Pedro). Y dos sujetos más: la organización AMUC (Pradera) y el Consejo Comunitario de Yurumanguí (Buenaventura) ya tiene formulados y diseñados sus planes integrales de reparación colectiva. 

La señora Toro Vélez resaltó también que este año fueron puestas al servicio en Buenaventura dos Unidades Móviles Especializadas (UMEB) a través de las cuales la entidad trabaja directamente en los territorios, enfocadas en la prevención de hechos victimizantes, en especial en las comunas 7, 10, 11 y 12, así como el corregimiento 8.

“Es una iniciativa de la Unidad que se aplica inicialmente en Buenaventura, con profesionales psicosociales y abogados. Hemos ganado la confianza de las comunidades y estamos trabajando por acercar cada vez más la oferta de las distintas entidades a la gente a través de las UMEB”, dijo la funcionaria. 

En ese mismo sentido de acercamiento de los usuarios a nuestros servicios, la territorial Valle del Cauca se puso como meta fortalecer sus jornadas de atención en los distintos municipios, logrando durante el año 142 jornadas presenciales que se realizaron en 39 de las 42 localidades del departamento.

En total, durante el año 2021 fueron atendidas por la entidad en el Valle del Cauca, a través de sus centros y puntos de atención, así como mediante las jornadas, 163.823 personas. Inicialmente, por la coyuntura del covid 19, parte de esa atención se dio a través de nuestros canales telefónicos, pues el servicio nunca se suspendió. Y de manera gradual, cuando las condiciones estuvieron dadas, se dio apertura a los puntos presenciales. 

Indemnizaciones y alianzas

En lo relativo a cartas de indemnización, el Valle del Cauca llegó a las 6.489 cartas entregadas a noviembre del 2021, a través de las cuales sus beneficiarios pudieron hacer efectivo en los bancos el cobro de $62.552 millones. De esta manera, este departamento suma un total de 57.581 personas a las que se les ha hecho efectiva esta medida de reparación integral, por recursos que suman $456.524 millones. 

Las alianzas con entidades del sector privado para lograr beneficios para la población víctima del conflicto han sido un sello de la territorial Valle del Cauca y este año no fue la excepción. Es así como se firmaron cartas de entendimiento con entidades como el Instituto Departamental de Bellas Artes, el Instituto CEIM, Intep, el Instituto Técnico Agrícola, la Fundación Academia de Dibujo Profesional y la Universidad del Pacífico. A través de estos convenios se lograron descuentos de hasta el 30 % en planes de estudio para la población que está en el Registro Único de Víctimas (RUV).

Luz Adriana Toro recordó que en la tarea de la reparación integral el apoyo psicosocial ocupa un importante lugar. Por eso, señaló, este año se atendieron 939 personas a través de la estrategia fortaleciendo capacidades en los municipios de Ginebra, Riofrío, Tuluá, Palmira, Candelaria, Sevilla, Ansermanuevo, Bolívar, San Pedro, Dagua, Jamundí, Cali y Buenaventura, atendiendo con enfoque diferencial a niños, niñas, jóvenes, adultos mayores, adultos y mujeres víctimas de violencia sexual.

Además, se hizo trabajo psicosocial con dos comunidades que pasaron por procesos de reubicación y con las cuales se fortaleció el tejido comunitario: Villa Ema (El Dovio) y El Rodeo (Jamundí), en donde participaron aproximadamente 400 personas.

De otro lado, la directora indicó que se logró la actualización de los planes de retorno y reubicación de nueve comunidades en Cali, Dagua, Buga, Pradera, Tuluá, Trujillo, Palmira y el Dovio y que se dio cumplimiento a todas las acciones necesarias solicitadas a la entidad en el marco de las alertas tempranas emitidas en el departamento, con miras a evitar que se cometan nuevos hechos victimizantes. 

“Fue un año de intenso trabajo y de avances que nos dejan grandes retos para el 2022. Nuestro compromiso con las 561.113 víctimas del Valle del Cauca sigue firme, así como nuestra voluntad de seguir trabajando de la mano de las distintas alcaldías y mesas de participación de víctimas con las cuales este año también se hizo una muy valiosa sinergia”, dijo la directora territorial. 

(LJA/COG)