Escudo de Colombia y texto de la Unidad para las Víctimas

Reconstruir y avanzar para seguir sanando, El Salado 22 años después de la masacre

“Ya el tema no es hablar de la masacre”, es una frase que se repite en cada espacio comunitario compartido con la Unidad para las Víctimas y las entidades que hacen presencia permanente en el territorio. 

El tema para los salaeros es hacer memoria para las futuras generaciones, reconstruir el tejido social y desaparecer el estigma que los llevo a vivir más de 7 días de horror.  

Los hechos que ocurrieron entre el 16 y el 21 de febrero del año 2000, serán recordados como los episodios más violentos de las masacres ocurridas en el país. La incursión paramilitar dejó más de 60 personas fallecidas y muchas afectaciones y traumas que no se han superado y reclaman verdad. 

En el camino hacia la reparación, los habitantes de El Salado han contado con el acompañamiento del Estado. Ellos iniciaron un proyecto piloto de la Comisión Nacional de Reparación y Reconciliación-CNRR. 

Dando continuidad al proceso, en el año 2012, la Unidad invitó a la comunidad al programa de reparación colectiva, siendo aprobado su Plan Integral el 16 de octubre en el Comité de Justicia Transicional del municipio, con 37 acciones reparadoras. 

Las medidas de restitución, rehabilitación, satisfacción y garantías de no repetición quedaron consignadas en el documento. La inversión de las acciones implementadas del Plan por parte de la Unidad supera los 710 millones de pesos. 

“Gracias a la reparación colectiva la comunidad ha desarrollado proyectos productivos para fortalecer su vocación agrícola, se ha realizado el mejoramiento de las vías, se han dotado a las escuelas de mobiliario escolar y muchas acciones más en conjunto con las entidades del SNARIV”, manifestó la directora territorial en Bolívar y San Andrés, Miledy Galeano Paz. 

Acciones concretas 

La Unidad ha entregado 816 giros por concepto de indemnizaciones administrativas a víctimas por valor de $ 8.824.815.516. 

En el 2021 fueron entregadas 106 indemnizaciones judiciales a victimas incluidas en la sentencia de Justicia y Paz contra el postulado condenado Salvatore Mancuso y otros, con recursos del Presupuesto General de la Nación que ascendieron a $1.895 millones de pesos. 

A través del proyecto con el Banco Mundial se implementó de manera exitosa la estrategia de mediadores comunitarios para recuperar el tejido social en la comunidad.  

La Unidad para las Víctimas hizo entrega de maquinaria agrícola para fortalecer el sector productivo y dotó de mobiliario escolar y restaurante a la Institución Educativa Técnica Agropecuaria El Salado.  

Los elementos tecnológicos y los instrumentos musicales también hicieron parte de las entregas realizadas por la unidad a la institución educativa y a las sedes ubicadas en las veredas de El Bálsamo, Emperatriz, Pativaca, Espiritano, Santa Clara y Villa Amalia. 

La Estrategia “Entrelanzando” también llegó a estas comunidades como una medida de rehabilitación. Se conformó el grupo de tejedores y tejedoras que trabajan en procesos de fortalecimiento psicosocial a través de acciones como la pedagogía social, los duelos colectivos, la transformación de escenarios y las prácticas sociales que incluyen la recuperación de su cultura y sus costumbres. 

El programa de educación para adultos, el mejoramiento de los servicios públicos y la malla vial y la entrega de la Iglesia Católica por parte del gobierno departamental y municipal, también hacen parte del proceso de reconstrucción de esta población que fue afectada por el conflicto. 

Para el 2022, la Unidad tiene proyectado el avance del Plan Integral de la mano con las comunidades y el Estado.

  FIN/PDC/CJF/AMA