Escudo de Colombia y texto de la Unidad para las Víctimas

La reparación simbólica de las mujeres víctimas de Quibdó a través de la estrategia ‘Vivificarte’

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Vivificar significa dar vida, confortar, dar vitalidad o fuerza a una persona que lo necesita.

De esta manera, en el Centro Regional de Atención Víctimas en Quibdó, se realizó la estrategia Vivificarte, que contó con la participación de 22 mujeres sobrevivientes al conflicto armado que han sido víctimas de delitos contra su integridad, libertad y formación sexual.

Durante tres días, las mujeres realizaron una metodología participativa que les permitió plasmar, a través de manualidades, dibujos y otras expresiones, sus vivencias, sus fortalezas y también sus visiones de vida, promoviendo de esta manera un escenario dignificante que aporte a la reparación simbólica e integral de las mujeres víctimas.

“En esta jornada se ha realizado un trabajo muy bonito porque las mujeres se han encontrado con ellas mismas, han trabajado todo el tema personal, sus emociones, sus sentimientos, sus situaciones que tienen a diario. Ha sido un trabajo diferente, hecho desde el ser de la mujer y siento que las mujeres han estado tranquilas, contentas porque han estado participando activamente, atentas. Este es un proceso que sirve mucho para la salud mental de las mujeres sobre todo porque el tema de la violencia sexual es un tabú. Las mujeres no hablan de lo que sucedió porque muchas se sienten culpables del hecho.  Entonces poder plasmar todo ayuda a sanar, a sacar todas las situaciones dolorosas, las tristezas que se tienen dentro”, aseguró Adolfa Perea, lideresa de la Fundación Mujer y Vida.

La Unidad para las Víctimas desarrolla esta estrategia como una metáfora de la mujer– árbol, refiriéndose a ella como ese ser que renace, vivifica, se mantiene fuerte y busca siempre una proyección de su vida; por ello va enfocada a recordar lo importante y valiosa que es cada mujer para la sociedad.

Resaltar el poder transformador de las víctimas del conflicto armado es una de las apuestas más importantes de la Unidad para las Víctimas. Seguimos trabajando para dignificarlas y reconocer su capacidad de cambiar las condiciones de vida de sus familias, comunidades y territorios; son las víctimas del conflicto armado quienes hoy deben tener la palabra, pues son quienes han dado segundas oportunidades y son el referente ético y moral para guiar al país hacia la Paz Total.