Tierralta es tierra de zenúes. Se encuentra al sur occidente de Córdoba y es el municipio de mayor extensión en la subregión del Sinú. Para llegar a este lugar se recorren 80 kilómetros desde Montería por una vía que –a pesar del trajín diario de camiones– goza de buen estado.
Es aquí –en medio del ensordecedor ruido de motocicletas, del perifoneo que anuncia rifas o programas sociales, de la dinámica comercial que se aprecia fácilmente pues es un municipio pujante– donde ocurre una historia trazada por el dolor de la ausencia e inspirada por la alegría de vivir.
Es aquí donde Cielo Hernández y su hija Ariana construyen de nuevo el sueño que el conflicto les arrebató en el 2007, cuando una columna paramilitar asesinó a Óscar Darío Hurtado, su esposo, trabajador de las madererías tan comunes en esta región, crimen que aportó una víctima más al registro que en el 2013 alcanza las 33.243 víctimas en Tierralta, municipio que presenta 32. 424 casos asociados al desplazamiento forzado y 1.726 casos, al homicidio.
“Óscar era conocido de una profesora a la que yo acompañaba a ciertas clases, porque me gustaba lo de la docencia. Ella me lo presentó y él me supo enamorar por sus atenciones. Cuando cumplí 17 años me regaló una serenata y anda que en medio de vallenatos no faltó el himno: “Las mañanitas”, recuerda.
Cielo vivía donde una abuela, en el barrio 20 de Julio, al otro extremo de Tierralta. Hasta allá llegaban los suspiros y atenciones de Óscar. Sin embargo, las diferencias de edad marcaron distancias con la familia. Cielo tenía 17 y él le llevaba 20 más. Esto los enrumbó hacia una decisión arrebatada: en enero del 2003 se fueron a vivir a casa de la madre de Óscar: “Nos ‘espumamos’ y llegamos donde mi suegra. Esa vez hicimos una gran locura porque nos fuimos sin permiso para Barranquilla”.
La familia de Cielo vino a aceptar a Óscar en el 2006, pero al año siguiente lo que hubo que aceptar fue su muerte. “Ya la relación con mis hermanos era mejor, pero pasó lo que pasó y ni modo, uno tiene que resignarse… ajá”.
“Él era maderero, trabajaba en Ayapel, y por allá no dejaban casi trabajar. Les decían a los trabajadores que tenían que pagar una cuota y Óscar respondía que él no tenía por qué pagarles nada”.
Ayapel está más al norte, hacia el departamento de Sucre. En la parte baja del municipio –conocido como ‘la capital pesquera de Colombia’, por sus abundantes criaderos de bocachico y bagre pintado– son comunes los cultivos de arroz, y en la sierra, la extracción de maderas finas, como robles, cedros y teca.
La situación de la familia Hurtado Hernández no era distinta a la de otras familias en Córdoba que presenciaron o padecieron hechos similares, aun después del famoso “Pacto de Ralito” del primero de julio de 2004. La disputa por la tierra en esta zona del país alcanzó cifras alarmantes: se abandonaron 60.851 hectáreas en Córdoba, entre 1997 y 2007, según revela el Centro de Memoria Histórica, de las cuales 32. 617 eran de Tierralta.
Tierralta fue, desde 1988, cuna del paramilitarismo, por cuanto el despliegue de esta estructura que tenía presencia en el Magdalena Medio llegó a hacer cama en Urabá y Córdoba. La zona era comandada por Salvatore Mancuso, Diego Murillo alias ‘Don Berna’, Alias ‘Cuco Vanoy’ y ‘El Alemán’, entre otros.
Y Óscar, como tantos otros, cayó en manos de ese tributo paramilitar, que en medio de las disidencias, como lo haría saber el Sistema de Alertas Tempranas de la Defensoría del Pueblo, daría lugar a las acciones de grupos como ‘Los Traquetos’, ‘Los Paisas’, ‘Don Mario’ y ‘Las Águilas Negras’, cuya presencia se hizo notar en Tierralta, Montelíbano, Puerto Libertador, Planeta Rica y Montería.
A pesar de este panorama, que dominado la región, los tierraltenses abren sus negocios, los niños juegan se respira el aire limpio que llega del Parque Nacional Paramillo, reserva natural de la Cordillera Occidental entre Antioquia y Córdoba.
Estas maravillas incalculables y seductoras se prolongan hasta llegar al barrio Alfonso López, entrar en el patio de tierra y posarse en los ojos de Cielo Hernández, que son anchos, que esconden misterios y que con pasión miran la vida.
En un rincón del patio hay un gajo de bananos criollos y unas cuantas gallinas se pasean por todo el lugar. La primera expresión de Cielo parece el título de un bestseller: Por amor a Ariana yo hago todo”, que en seis palabras, que equivalen a los años de su hija, resume la vida.
Por amor a la pequeña es que Cielo ha superado el dolor que le dejó la muerte de Óscar Darío, quien tristemente ha tenido que repetir la vida de ella: crecer sin la compañía de su papá, ya que Cielo, pese a tener a su padre vivo, don Luis Hernández, creció al cuidado su madre, doña Elsa María Pérez, que a sus 63 años suele hacer diferentes actividades en el día, entre ellas, ir a la iglesia pentecostal, porque la fe, cualquiera que sea la concepción religiosa, mueve montañas.
Hoy, dos de sus cinco hermanos viven en Bogotá, a donde fueron en busca de mejores oportunidades y a liberarse de las guerras de pandillas que se solían –más que ahora– dar en el municipio. Ella, en cambio, se quedó porque su vida pelechó en Tierralta: allí se enamoró y allí lloró la trágica partida de su esposo.
Sin embargo, Cielo ha sabido sobreponerse. A sus 29 años es una mujer alegre y con fuerza para seguir viviendo. El vigor, que no riñe con la delicadeza, se observa cuando toma su moto, la empuja hasta la calle, presiona la pata y acelera para dar un paseo o hacer alguna diligencia bajo los más de 30 grados de temperatura, inclementes, que regularmente acompañan un día en Tierralta.
Esa alegría y tranquilidad se ve también en los adornos que tiene en los dedos de los pies: son jardines tatuados que Mayra, una buena amiga, le realiza, como obras de arte, en sus minúsculas uñas. No obstante, para llegar a este estado emocional tuvo que soportar fuertes depresiones:
“Los primeros años fueron muy duros. Yo casi no asimilaba lo que estaba pasando. Duré casi dos años sin ganas de salir ni a la puerta por temor, pero tres años después de la muerte de Óscar me metí a la Defensa Civil, fui parte del primer grupo que fundó la organización acá, con Solera, José, Carlitos y Mariela, que es la actual líder. Nos motivó en ese entonces meternos a la Defensa Civil, porque veíamos que ante una emergencia o una inundación había que esperar la llegada de la gente de Montería, y pues cuando llegaban ya casi no había evidencias de lo ocurrido”.
Su ingreso tuvo un recibimiento muy particular. Era época de invierno y las quebradas El Güi y Nueva Platanera se habían desbordado: “Como quien dice nos estrenaron. Eran como las 12 de la noche y nosotros todos nuevos todavía estábamos sacando gallinas y personas del lodo”.
Su pasión por la Defensa Civil le impide pensar que un día se retire de la institución que en los peores momentos de su vida le dio el respiro que necesitaba para seguir.
“No sé si más adelante salgan oportunidades laborales por fuera de Tierralta, pero si las hay habrá que irse porque yo lo hago por el futuro de mi hija, pero sí me gustaría que fuera aquí para poder estar con la Defensa Civil, porque para mí significa mucho. La verdad, me he encariñado con la entidad”.
Tiene razones de peso para decirlo porque el grupo aspira llegar a 100 voluntarios y así constituirse como Junta, y de acuerdo con los estatutos que rigen esa organización, tener en su equipo a líderes voluntarios ‘civilitos’, juveniles, activos y asesores, además de acceder a beneficios como el carro y la oficina.
“Ahora somos 80; nos faltan 20 para que nos constituyan como Junta y nos den más herramientas porque estamos trabajando con las manos”, dice.
Hay una razón más para preferir quedarse siempre en Tierralta: “Es un buen vividero. Aquí puedes salir en cueros y nadie te dice nada; todavía hay solidaridad. Tú vas a la casa de un costeño y por más estricto que haya sido con el almuerzo, hay pa’ ti, y eso no pasa en otras ciudades”, cuenta orgullosa.
A pesar de todo, Cielo no está sola. En casa la acompañan su madre, José, su hermano mayor y su pequeño sobrino, Fabián, de seis años también, un tierraltense juguetón, que no para de correr por el patio de la casa, pero muy disciplinado a la hora de estudiar, y muy creativo a la hora de pintar.
Además, no le falta la música. Tiene una colección completa de canciones de Los Bukis, grupo mexicano fundado en los años 70 por Joél Solis y Marco Antonio Solís.
Al pensar en Los Bukis, Cielo recuerda la canción “Cómo fui a enamorarme de ti”, sin que se trate de una evocación de Óscar Darío, de quien está muy orgullosa haberse enamorado porque era, según cuenta, un buen hombre.
Tras la pérdida de su esposo la situación para ella y la niña se complicó. Fue con su valor que la sacó adelante, el mismo que hoy le da la potestad de decirles a otras víctimas que es posible: “Sí se puede, todo es cuestión de querer, de tener ganas de salir adelante, de valorar vida tal y como es, si no míreme a mí, que ya no lo tengo a él, pero la vida sigue”.
Gracias a que Cielo fue vinculada a la ruta de atención, asistencia y reparación integral del Gobierno Nacional, recibió su indemnización, lo que, sin mejorar su situación económica, le revivió de nuevo el sueño que había construido con Óscar: “Yo sé que el dinero no revive al muerto, pero es como sí Dios estuviera dándonos una recompensa porque con él soñábamos construir una casa para nuestra familia, y lo primero que hice cuando recibí la indemnización fue meter una parte en un CDT, la otra la utilicé para comprar el lote y empezar a construir, como puede ver, ahí voy”, dice.
Otra parte del dinero fue a parar a la Corporación Unificada Nacional de Educación Superior (CUN) donde realizó la tecnología en Asistencia Administrativa y obtuvo su grado el 24 de julio de 2013. Ahora, con su experiencia en la Defensa Civil y la nueva formación en el campo del secretariado, espera que vengan todas las oportunidades del mundo.
Para ella la reparación no es el dinero en sí, sino lo que se puede reconstruir con este: “A mí por ejemplo, me permite volver a soñar con la casita y a estudiar para salir adelante, y con mi ejemplo de superación incentivar a mi hija para que vea que eso es bueno. Antes uno veía que no pasaba nada con las víctimas y ahora el Gobierno sí hace presencia: la gente no está tan desamparada y eso le hace a uno ver el mundo con otra perspectiva”.
En los ratos de ocio, Ariana va hasta sus brazos y le dice: “Cuando sea grande quiero ser doctora para cuidarte a ti y a mi abuela”. Cielo solo sonríe responde: “Vale”.
La indemnización de Cielo se suma a la de otras 460 víctimas, de las cuales 28 son menores de edad, a quienes se les han constituido encargos fiduciarios por valor de 112 millones. La inversión total en indemnizaciones asciende a 2.440 millones en Tierralta.
Por ahora vive su cotidianidad. Nada de lo ocurrido le quitó el sabor vallenato, ni el gusto por el pescado frito o en viuda (algo así como pescado sudado), extraído del río Sinú, no muy lejos del casco urbano de Tierralta, donde según Cielo: “Hacemos paseos de olla, de esos que se ven en las novelas costeñas”.
Por ahora se dedica a la Defensa Civil, a Ariana y a construir la casa que espera inaugurar el 4 de noviembre de este año, cuando cumplirá 30 años de vida. Sabe que como mujer, el amor la puede volver a sorprender, pero prefiere no pensar en eso.
La hamaca no para de moverse, pero ya no es Cielo la que se balancea, ahora es Ariana la que está allí. Algunas nubes, como retratadas por el poeta Rubén Darío, yerran tranquilas en el azul. Por más que la sangre regó por la tierra en esa zona de Colombia no ha podido manchar el tapete azul que pasea por encima de los robles, de los tradicionales techos de paja y ‘uno que otro –solo uno que otro– sombrero vueltiao’.
Cielo regresa y la acompaña. Dos caricias son suficientes por el momento, y la recompensa: una sonrisa.
Comienza el viaje de regreso, enmarcado, en el día, por haciendas, cultivos, bufaleras y otros atractivos, y en las noches, por la dramaturgia y la danza de las luciérnagas que parecen, mientras la noche rueda, decirnos adiós, anhelando el regreso.
Subscribe to our weekly newsletter with our latest news and news from The Unit for Victims.
Carrera 85D No. 46A – 65
San Cayetano logistics complex
Switchboard: +57 (601) 7965150
Medellin:
Calle 49 No 50-21 14th floor
Cafe Building
Zip Code: 050010
Línea nacional:
018000911119
switch phone:
57 (601) 426 11 11
Institutional mail:
servicioalciudadano@unidadvictimas.gov.co
Judicial notices:
notificaciones.juridicauariv@unidadvictimas.gov.co
Hours of operation:
Monday to Friday.
Ventanilla única:
08:00 a.m. – 04:00 p.m.
Unit for Victims
compliance status
We strongly believe that the Internet should be available and accessible to all, and we are committed to providing a website that is accessible to the widest possible audience, regardless of circumstance and ability.
To accomplish this, we aim to adhere as strictly as possible to the World Wide Web Consortium (W3C) Web Content Accessibility Guidelines 2.1 (WCAG 2.1) at level AA. These guidelines explain how to make web content accessible to people with a wide range of disabilities. Adhering to those guidelines helps us ensure that the website is accessible to all people: people who are blind, people with motor disabilities, visually impaired, cognitively disabled, and more.
This website uses various technologies aimed at making it as accessible as possible at all times. We use an accessibility interface that allows people with specific disabilities to adjust the user interface (user interface) of the website and design it according to their personal needs.
In addition, the website uses an AI-based application that runs in the background and constantly optimizes its accessibility level. This application repairs the HTML of the website, adapts its functionality and behavior for screen readers used by blind users and for keyboard functions used by people with motor disabilities.
If you have found a malfunction or have ideas for improvement, we would be happy to hear from you. You can communicate with the operators of the website using the following email servicioalciudadano@unidadvictimas.gov.co
Screen reader and keyboard navigation
Our website implements the ARIA (Accessible Rich Internet Applications) attribute technique, along with several different behavior changes, to ensure that blind users who visit with screen readers can read, understand, and enjoy the features of the website. As soon as a user with a screen reader enters your site, they are immediately prompted to enter the screen reader profile so they can effectively navigate and operate your site. Here's how our website covers some of the most important screen reader requirements, along with console screenshots of code examples:
Screen Reader Optimization: We run a background process that learns website components from top to bottom, to ensure continued compliance even when the website is updated. In this process, we provide screen readers with meaningful data using the ARIA attribute set. For example, we provide accurate form tags; actionable icon descriptions (social media icons, search icons, cart icons, etc.); validation guide for form inputs; roles of elements such as buttons, menus, modal dialogs (popups), and others. In addition, the background process scans all images on the website and provides an accurate and meaningful description based on Image Object Recognition as an ALT (alternative text) tag for images that are not described. It will also extract texts that are embedded within the image, using an OCR (Optical Character Recognition) technology. To activate screen reader settings at any time, users just need to press the Alt+1 keyboard combination. Screen reader users also receive automated prompts to activate screen reader mode as soon as they enter the website.
These settings are compatible with all popular screen readers, including JAWS and NVDA.
Keyboard navigation optimization: The background process also adjusts the HTML of the website and adds various behaviors using JavaScript code to make the website work with the keyboard. This includes the ability to navigate the website using the Tab and Shift+Tab keys, operate dropdown menus with the arrow keys, close them with Esc, activate buttons and links using the Enter key, navigate between radio items and checkboxes using the arrow keys and complete them with the space bar or the Enter key. In addition, keyboard users will find quick navigation and content skip menus, available at any time by clicking Alt+1, or as the first site elements while navigating with the keyboard. The background process also handles triggered popups by moving keyboard focus to them as soon as they appear, and not allowing focus to drift away from it.
Users can also use shortcuts such as "M" (menus), "H" (headers), "F" (forms), "B" (buttons), and "G" (graphics) to jump to specific items.
Disability profiles accepted on our website
Epilepsy Safe Mode: This profile allows people with epilepsy to use the website safely by eliminating the risk of seizures resulting from flashing or flickering animations and risky color combinations.
Visually Impaired Mode: This mode adjusts the website for the comfort of visually impaired users such as impaired vision, tunnel vision, cataracts, glaucoma, and others.
Cognitive Impairment Mode – This mode provides different support options to help users with cognitive impairments such as dyslexia, autism, AVC, and others to focus on the essential elements of the website more easily.
ADHD Friendly Mode – This mode helps users with ADHD and neurodevelopmental disorders to read, navigate, and focus on the main elements of the website more easily, while significantly reducing distractions.
Blind Mode – This mode configures the website to be compatible with screen readers such as JAWS, NVDA, VoiceOver, and TalkBack. A screen reader is software for blind users that is installed on a computer and smartphone, and websites must be compatible with it.
Keyboard Navigation Profile (Motor Disability): This profile allows people with motor disabilities to operate the website using the Tab, Shift+Tab, and Enter keys on the keyboard. Users can also use shortcuts such as "M" (menus), "H" (headers), "F" (forms), "B" (buttons), and "G" (graphics) to jump to specific items.
Additional UI, layout, and readability tweaks
Font Settings: Users can increase and decrease its size, change its family (type), adjust spacing, alignment, line height, and more.
Color Settings: Users can select various color contrast profiles, such as light, dark, inverted, and monochrome. Additionally, users can swap title, text, and background color combinations, with more than 7 different color options.
Animations: Epileptic users can stop all running animations with the click of a button. Interface-driven animations include videos, GIFs, and flashing CSS transitions.
Content Highlighting – Users can choose to emphasize important elements like links and titles. They can also choose to highlight only focused or suspended items.
Audio Mute: Users with hearing aids may experience headaches or other issues due to autoplay of audio. This option allows users to mute the entire website instantly.
Cognitive disorders: We use a search engine that is linked to Wikipedia and Wiktionary, allowing people with cognitive disorders to decipher meanings of phrases, initials, slang, and others.
Additional features: We provide users with the option to change the color and size of the cursor, use a print mode, enable a virtual keyboard, and many other features.
Browser and assistive technology support
Our goal is to support the widest possible range of browsers and assistive technologies, so our users can choose the tools that work best for them, with as few limitations as possible. Therefore, we have worked very hard to be able to support all the major systems that comprise more than 95 % of the user market share, including Google Chrome, Mozilla Firefox, Apple Safari, Opera and Microsoft Edge, JAWS and NVDA (readers). screen), for both Windows and MAC users.
Notes, comments and feedback
Despite our best efforts to allow anyone to adjust the website to their needs, there may still be pages or sections that are not fully accessible, are in the process of being made accessible, or lack an adequate technological solution to make them accessible. Still, we're continually improving our accessibility, adding, updating, and improving its features and features, and developing and adopting new technologies. All this to achieve the optimal level of accessibility, following technological advances. For assistance, please contact servicioalciudadano@unidadvictimas.gov.co