Escudo de Colombia y texto de la Unidad para las Víctimas

Así coordinará la Unidad para las Víctimas el retorno de indígenas desplazados en Medellín

emberasmedellin1 0
emberasmedellin1 0

Tras una jornada de diálogos con los representantes de 780 indígenas que se encuentran albergados en el coliseo Carlos Mauro Hoyos en Medellín (Antioquia) se lograron acuerdos para resolver las carencias causadas por varios años en condición de desplazamiento forzado.

Las soluciones concertadas entre los líderes Embera Katío, la Unidad para la para las Víctimas y la Alcaldía de Medellín, para superar las protestas de los desplazados, se enfocan en agilizar el retorno de esta comunidad a sus territorios en Chocó, como el Alto Andágueda o la reubicación en otras zonas. 

La Unidad, a través de Claudia Patricia Vallejo Avendaño, directora territorial en Antioquia, anunció que coordinarán las acciones para implementar un plan de retorno con enfoque diferencial étnico en las próximas semanas. 

 

Medellín

 

Explicó que “el próximo lunes inicia la caracterización de cada una de las familias para identificar sus actuales condiciones de vida y carencias para atenderlas. En la entrevista de caracterización cada familia podrá decidir si quiere retornar o reubicarse. Es un retorno con voluntariedad, seguridad y dignidad”. 

La Unidad también apoyará con alimentación la atención inicial de las 198 familias indígenas en el albergue temporal en Medellín. Posteriormente, “a todas las familias que retornen a Chocó se les va a dar por un año ayuda humanitaria de emergencia en alimentos, mientras recuperan sus proyectos productivos para abastecerse”, indicó Vallejo.

Garantías para volver a resguardos

Para garantizar la permanencia en sus resguardos con condiciones dignas y evitar la repetición de hechos victimizantes como el desplazamiento forzado, también se coordinará con las entidades que conforman el Sistema Nacional de Atención y Reparación Integral a las Víctimas llevar la oferta del Estado.

Durante los diálogos, los líderes indígenas identificaron como sus principales problemáticas y vulnerabilidad el desempleo, la desnutrición y condiciones de hábitat precarias en inquilinatos de Medellín.

 

Medellín

 

Uno de ellos, Rodrigo Vitucay, afirmó que completan cinco o más años como desplazados: “No hay empleo, ni vivienda y hay hambre. Por eso necesitamos apoyo para poder trabajar y sobrevivir aquí en la ciudad o garantías para retornar a nuestros territorios”.

Para resolver esas necesidades, que fueron verificadas en visitas en las zonas donde viven, en la mesa de mediación se acordó la articulación de acciones para mejorar condiciones de trabajo y seguridad alimentaria. Entre estas apoyar un proyecto de elaboración y comercialización de artesanías indígenas. Esto con el fin de evitar la mendicidad que involucra a los niños y adolescentes de la comunidad.