Lesdy Marlody Rodríguez Quiñones, de 32 años, es una mujer afrodescendiente, resiliente, sobreviviente del conflicto armado y creadora de la Fundación Afrocolombianos Unidos por la Cultura y los Derechos Humanos (FUNAMU) en Florencia, capital del departamento de Caquetá.
Desde esta organización, lidera procesos de conservación y visibilización de manifestaciones culturales, haciendo énfasis, en la formación de nuevas generaciones a través de la escuela de liderazgo juvenil.
Otras de las tareas emprendidas desde 2007 de la mano de sus colaboradores, consisten en beneficiar mujeres en la generación de ingresos, a partir del diseño y confección de prendas de vestir, varias de estas inspiradas en la identidad afro y la biodiversidad de la amazonia, que pueden lucir o vender, para llevar el sustento digno a sus familias.
Esta mujer, impregnada de amor por lo que significa ser afrodescendiente y sus tradiciones ancestrales que se mantienen vivas de generación en generación, hoy desde las selvas del Caquetá, le cuenta a Colombia el significado de ser afro.
Exclama con entusiasmo que ser afro, “es llevar un legado ancestral dentro, es conservar una serie de manifestaciones culturales heredadas de nuestros antepasados africanos con orgullo, es sabrosura y diversidad, es nacer con un color de piel un poco más oscuro”.
Luego afirma con un dejo de tristeza, y al mismo tiempo con orgullo de su raza, ser afro es “también recibir discriminación y rechazo por parte de algunas personas que no aceptan la diferencia”, dice Marlody.
Experiencia y reinvención
Actualmente hace parte del “Espacio Nacional de Consulta Previa de Medidas Legislativas y Administrativas de Amplio Alcance, susceptibles de Afectar a las Comunidades Negras, Afrocolombianas, Raizales y Palenqueras”. Es también la vicepresidenta de la Comisión consultiva departamental. Por todo esto, con conocimiento de causa, Marlody habla de legislación, tradición y de la trascendencia del 21 de mayo, día de la afrocolombianidad.
Enfatiza que “a partir de la ley 725 del año 2001, se celebran 150 años de la abolición de la esclavitud y se declaró a través de la expedición de la ley del 21 de mayo de 1851”. En ese contexto, indica que desde allí, “venimos año a año celebrando nuestras manifestaciones culturales, dando a conocer nuestras problemáticas, necesidades e idiosincrasia, pero también el legado y el aporte que ha hecho la población negra, afrocolombiana, raizal y palenquera a la construcción de país”.
Sobre la Unidad para las Víctimas, Marlody agradece la gestión de la entidad para apoyar a los sobrevivientes del conflicto armado y recuerda que la guerra le arrebató a su pequeño hijo, en un hecho que quiere olvidar para continuar reconstruyéndose en diferentes escenarios.
“En esta oportunidad quiero agradecer a la Unidad, porque en su momento nos brindó acompañamiento sicosocial, para superar una situación que fue muy difícil en mi vida, y que fue la pérdida de mi hijo. También quiero destacar que ha venido acompañando algunos procesos de la fundación FUNAMU, que lidero hace varios años, para apoyar a las mujeres y a los jóvenes afro que así lo requieren”, puntualizó la lideresa.
Para Marlody Rodríguez, no existen barreras para progreso, es especialista en formulación y evaluación de proyectos, licenciada en Lengua Castellana y Literatura y actualmente, cursa estudios de Maestría en Gestión Cultural y Producción Audiovisual. Ha sido investigadora para la Comisión de la Verdad y asesora en materia de derechos humanos.
(Fin/XNI/AMA/LMY)
