Gracias al plan de reparación colectiva que implementa la Unidad para las Víctimas, la población afectada por el conflicto armado en Cocorná, al oriente de Antioquia, ya cuenta con el avance de un 80 % de su plan integral de reparación, el cual se espera quede cerrado al finalizar el 2021.
Durante los últimos años, los profesionales de la entidad han trabajado hombro a hombro con la comunidad representada por el comité de impulso (delegados de la población víctima) y por funcionarios de la administración municipal quienes se encargan del sostenimiento y seguimiento a los proyectos contemplados en la implementación del plan integral de reparación.
Algunas de las medidas que se han implementado y que se concertaron con la comunidad fueron: dotación de balones, uniformes, arcos, etc., para las prácticas deportivas juveniles; dotación mobiliaria y de cocina a la casa juvenil; instalación de cámaras de seguridad en el casco urbano; dotación de trajes culturales y mobiliario para la casa del anciano, instrumentos musicales y trajes típicos para la casa de la cultura, dotación e infraestructura de la casa campesina con fines de alojamiento y capacitación para la población rural, renovación de vías y alcantarillado municipal y reparación de placa polideportiva,
En este municipio también se apoyó la precooperativa Cocostylo dedicada a las confecciones con una inversión de 181 millones de pesos, que incluyó capacitación, mejora de infraestructura y compra de maquinaria, beneficiando a 100 víctimas del conflicto.
Finalizará con la implementación de proyecto turístico comprendido por 5 murales como sendero que termina con un trapiche panelero para poder encantar a propios y visitantes con fines lucrativos.
“Estamos muy contentos y satisfechos con todo lo que nos han dado; sabemos que ya es tarea nuestra continuar fortaleciendo la confianza y el tejido social con el grupo del comité de impulso y de tejedores, que nos enseñaron para que perdure este proceso tan bonito de la reparación colectiva en nuestro municipio”, afirmó Orlando Castaño, miembro del comité de impulso del sujeto y quien ha estado durante el principio de este proceso.
Otro de los componentes de la reaparición colectiva fue el sicosocial, a través de la estrategia “Entrelazando” desarrollada por profesionales de la entidad que dieron formación durante varios años, dividida en talleres con el fin de tratar a la comunidad desde lo emocional y mental para fortalecerse con fines comunes y crear liderazgos y empoderamiento.
Gracias a esta estrategia se han recuperado las fiestas campesinas, los encuentros sociales y convites, los torneos deportivos entre veredas, los grupos musicales y las juntas de acción comunal. “Que la gente se dé cuenta que necesitamos recuperar lo que teníamos perdido; talleres en veredas y en el casco urbano, gracias al apoyo sicosocial. Para mí el aporte ha sido muy completo, y ha sido necesario para poder que las personas puedan avanzar y no quedarse en el miedo que por años nos tenían sometidos”, concluyó Castaño.
“De acuerdo a la ley 1448, algunas de las medidas son restitución, rehabilitación, satisfacción y garantías de no repetición, que claramente las vemos implementadas con cada una de las acciones materializadas en las diferentes entregas de dotaciones que se realizaron en este municipio. Es un plan muy completo, concertado con la comunidad, logrando la recuperación de sus prácticas culturales y su tejido social”, aseguró Wilson Córdoba Mena, director de la Unidad para las Víctimas en Antioquia.
En Antioquia, la Unidad para las Víctimas atiende a 65 sujetos de reparación colectiva reconocidos (más de 750 en Colombia), 22 de estos con planes en implementación con medidas como rehabilitación de vías, escuelas, puentes, parques, dotaciones a centros médicos, instituciones educativas, puestos de salud rurales, casas de la cultura, centros de acopio y apoyo a proyectos productivos.
FIN SMC/COG
