La Unidad para las Víctimas y la Fiscalía General de la Nación realizaron durante dos días la entrega digna de cadáveres a los familiares de dos víctimas de desaparición forzada y homicidio en el marco del conflicto.
José Miguel Argumedo Casarrubia, de Tierralta, y Néver Gregorio Santana Urango, de Ciénaga de Oro, en Córdoba, fueron desaparecidos en los años 2001 y 2007.
Sus restos fueron entregados a sus familias en un acto privado en Montería en el hotel Santa Clara Boutique para su sepelio en los municipios de donde son oriundos.
Los hechos de violencia sucedieron en el municipio de Tierralta (Córdoba) y en Pasto.
En la ceremonia, Sandra Santana Urango, hermana de Néver Gregorio, desparecido hace 15 años, expresó: “El espíritu de mi hermano amoroso por fin esta libre. Gracias a Dios nos entregaron a nuestro hermano después de tantos años sin saber de él. A pesar del dolor que vivimos, recibimos sus restos con alivio porque le vamos a dar sana sepultura en el pueblo”
Dentro del espacio, algunos familiares, hijos y hermanos, les hicieron un homenaje con mensajes en pendón en tela, inspirados en las personas desparecidas para resignificarlas.
En este proceso se brindó acompañamiento por parte de la Fiscalía especializada de Pasto y Córdoba y hubo ayuda psicosocial de los funcionarios de Unidad para las Víctimas como apoyo en los momentos de dolor que viven los familiares al reencontrarse con su ser desaparecido.
Habrá entregas de cadáveres en el municipio de Planeta Rica durante los próximos días.
(Fin/JRM/COG)
