La Unidad para las Víctimas realizó la entrega de ayuda humanitaria alimentaria y kits de aseo a 56 familias indígenas de la comunidad jiw ubicados en el Centro de salud, casco urbano de Puerto Concordia y en el asentamiento rural de Luna Roja, en límites del Meta y Guaviare.
Los habitantes de estas comunidades son víctimas de desplazamiento forzado, motivo por el cual el Estado colombiano desarrolla estrategias de atención y reparación para garantizar su pervivencia.
Carlos Arturo Pardo Alezones, director de la Unidad para el Meta y los Llanos Orientales, indicó que la Unidad llevó a cabo estas entregas de ayudas humanitarias en el marco de la Ley 1448 de 2011 y la normativa que orienta la atención y reparación integral con enfoque diferencial para pueblos y comunidades indígenas víctimas de la violencia.
“El paquete nutricional está compuesto por proteínas, cereales, harinas, aceite, carbohidratos, entre otros y deberán ser utilizados únicamente para los fines establecidos en orden a la asistencia humanitaria de las comunidades indígenas tras evaluaciones de sus condiciones de subsistencia mínima en lo que tiene que ver especialmente con alimentación y vivienda”, concluyó el director territorial.
En total se benefician con esta entrega más de 200 indígenas jiw que residen en estos territorios, agrupados en núcleos familiares.
(Fin/EVA/LMY)