El fin de semana, víctimas del conflicto armado de Bogotá y de los municipios cundinamarqueses de Cáqueza, Chía, Facatativá, Funza, Fusagasugá, Lenguazaque, Quetame, Susa y Zipaquirá recibieron indemnizaciones administrativas por cerca de $2.500 millones.
Para ello, la Unidad para las Víctimas convocó a 320 personas a la jornada que se llevó a cabo en el Centro de Encuentro para Paz y la Integración Local de Víctimas del Conflicto Armado ubicado en la localidad de Chapinero.
La mayoría de los asistentes coincidieron en afirmar que destinarán los recursos para fortalecer sus emprendimientos, desarrollar sus ideas de negocio y mejorar el estado de sus viviendas.
“Con mi familia vivimos en una pequeña casa, pero nos hace falta hacerle algunos arreglos, sobre todo por problemas de humedad. Esperamos poder remodelarla un poco y tenerla en mejores condiciones para este fin de año”, afirmó Luz Nelly Narváez, una de las beneficiadas.
Por su parte, Héctor Fabio Granja señaló que los recursos los invertirá en la compra de materiales e insumos con el fin de impulsar su negocio de pintura automotriz.
Los beneficiarios también recibieron la orientación y las recomendaciones de la Unidad para el uso adecuado de los recursos, principalmente en temas de adquisición o mejoramiento de vivienda, educación superior y en proyectos productivos.
La jornada contó, además, con el acompañamiento y la oferta institucional de entidades como Colpensiones, el Sena, Supersalud, la Secretaría de Desarrollo Económico, el Fondo Nacional del Ahorro, Unidat Universidad Internacional, Fundación P.T, Politécnico Gran Colombiano y Compensar.
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