El 25 de mayo de cada año se conmemora el Día Nacional por la Dignidad de las Mujeres Víctimas de Violencia Sexual con ocasión del conflicto. Es la fecha que, según lo establecido en el Decreto 1480 del 5 de agosto de 2014, reconoce “(…) la valentía, trabajo y resistencia de miles de mujeres víctimas de violencia sexual (…)”.
En el Registro Único de Víctimas (RUV), con corte al 30 de abril de 2020, hay 7.277.408 personas reconocidas que cumplen con los requisitos para acceder a las medidas de atención y reparación establecidas en la Ley 1448. De estas, 3.792.277 son mujeres, lo que equivale al 52,1 por ciento de las víctimas registradas. En cuanto a los delitos contra la integridad física y sexual se indica la inclusión de 32.092 víctimas, de las cuales, 29.035 son mujeres.
De acuerdo con la subdirectora general de la Unidad para las Víctimas, Lorena Mesa las mujeres víctimas de violencia sexual han tenido prioridad en la ruta de la reparación integral, por consiguiente, “han sido indemnizadas más de 8.000 de ellas con una inversión que supera los 160.000 millones de pesos”.
La Ley 1448 reconoce una amplia tipología de delitos contra la libertad e integridad sexual tales como: aborto forzado, anticoncepción forzada, explotación forzada, trata de personas, abuso sexual, embarazo forzado, planificación forzada, pornografía infantil, acceso carnal violento, esclavitud sexual, entre otros, que constituyen una grave violación a los derechos humanos, con un efecto desproporcionado física y emocionalmente en las mujeres.
Cada una de las tipologías trae repercusiones personales, familiares, sociales y comunitarias. Las mujeres experimentan miedo, tristeza, depresión, vergüenza; en ocasiones, como consecuencia del hecho, padecen enfermedades de transmisión sexual, rechazo por sus parejas y/o familiares y, en el caso de las niñas y niños nacidos a raíz de la violencia impartida hacia ellas, sentimientos indeterminados. En cuanto a lo último, se aclara que la Ley reconoce la inclusión en el Registro Único de Víctimas a los hijos e hijas nacidos a raíz del delito y tienen derecho a la reparación integral.
Para mitigar el dolor de las víctimas, la Unidad implementa la Estrategia de Reparación Integral para las Víctimas de Violencia Sexual, que desarrolla acciones en beneficio de las mujeres y está orientada a la puesta en marcha de las medidas de reparación establecidas en la Ley 1448, con enfoque de derechos y de género para atender las necesidades particulares.
“No solamente hemos aportado en su reparación material, también, a través de nuestra estrategia de recuperación emocional grupal han participado más de 3.574 mujeres. Esta estrategia ha permitido que ellas se recuperen emocionalmente y de esta manera la Unidad para las Víctimas seguirá aportando en su proceso de reparación”, indicó la subdirectora Mesa.
La estrategia proporciona acompañamiento psicosocial mediante actividades grupales que contribuyen al proceso de recuperación emocional y reparación integral; aporta herramientas de educación financiera para el empoderamiento y la autonomía; contribuye al fortalecimiento de los proyectos de vida e implementa actos de reparación simbólica como medida de satisfacción.
La Unidad para las Víctimas, al 31 de marzo de 2020, ha entregado 8.174 indemnizaciones a mujeres víctimas de violencia sexual, con una inversión de 160.806 millones de pesos. El total de víctimas que han recibido atención psicosocial a través de las distintas estrategias creadas para este fin han sido 3.547.
La entidad, como coordinadora del Sistema Nacional de Atención y Reparación Integral a las Víctimas (SNARIV) avanza en la implementación de acciones con enfoque de género para contribuir a la reparación integral de todas las mujeres víctimas del conflicto en Colombia.
(Fin/AVA/LMY)
